A nuestro país le cuesta avanzar con Pedro Sánchez y Nadia Calviño
Ranking global La competitividad de España mejora, pero aún está muy lejos de los países más avanzados
El prestigioso análisis económico de países que cada año realiza el Centro de Competitividad Mundial señala que hemos avanzado en algunas cosas, pero nos queda mucho por hacer en otros frentes
España ha recuperado tres posiciones en el Ranking de Competitividad Mundial que cada año elabora el Institute for Management Development (IMD), ubicado en Suiza. La modesta escalada de nuestro país le hace situarse en el puesto 34 entre las 63 economías analizadas.
El ranking analiza a fondo las 63 economías combinando datos concretos con respuestas a encuestas de altos ejecutivos (100 ejecutivos por economía de media). Los datos concretos se extraen de 333 criterios de competitividad seleccionados a partir de una investigación exhaustiva utilizando literatura económica, fuentes internacionales, nacionales y regionales y comentarios de la comunidad empresarial, agencias gubernamentales y académicos. Es un estudio muy serio.
La información recogida alimenta cuatro categorías con las que se analiza a cada país: desempeño económico, eficiencia gubernamental, eficiencia empresarial e infraestructura. Cada una de ellas se divide en cinco subcategorías. Los datos estadísticos representan dos tercios de los resultados de cada país, mientras que las respuestas a las encuestas representan el tercio restante y se realizaron en el primer y segundo trimestre de 2022.
De este análisis se concluye la clasificación, que lidera Dinamarca: «El país más avanzado del mundo en el ámbito digital encabeza la clasificación gracias a sus buenas políticas, a las ventajas que le otorga ser un país europeo, a una clara orientación hacia la sostenibilidad y al impulso de su ágil sector empresarial», afirma Arturo Bris, director del Centro de Competitividad Mundial del IMD. Suiza se sitúa en segunda posición, encabezando los factores de eficiencia gubernamental e infraestructura. Singapur ocupa el tercer puesto gracias a las importantes mejoras en su economía doméstica.
Suecia cae al cuarto puesto desde el segundo y Hong Kong asciende al quinto desde el séptimo, debido en gran medida a los resultados económicos (en especial en la subcategoría de economía doméstica).
Por su parte, los Países Bajos pierden dos posiciones y caen al sexto puesto desde el cuarto. Taiwán gana un puesto, ascendiendo desde el octavo al séptimo, y Finlandia entra en el top 10 por primera vez desde 2009: alcanza la octava posición desde la decimoprimera. Noruega cae del sexto al noveno puesto y Estados Unidos alcanza el top 10 una vez más, a pesar de descensos notables en determinadas subcategorías.
El turismo levanta a la economía
Tras haber descendido al puesto 39 en 2021, la recuperación del sector turístico, con su consiguiente impacto en el Producto Interior Bruto, ha jugado un papel fundamental en la recuperación de la competitividad de la economía española este año, según el Centro de Competitividad del IMD.
La mejora de España en la clasificación general es el resultado de un mejor desempeño económico que en el pasado año, especialmente en lo que se refiere al crecimiento del PIB, así como a los avances en el crecimiento de las exportaciones de servicios comerciales, la inversión internacional y el empleo, tal y como señala José Caballero, economista senior del Centro de Competitividad Mundial del IMD.
Asimismo, añade que «también hay mejoras sustanciales, aunque en menor medida, en las infraestructuras tecnológicas y científicas, y en las medidas sanitarias y medioambientales. Sin embargo, la eficacia de la administración y de las empresas parece algo estancada en comparación con 2021, especialmente en los casos de las finanzas públicas y de la legislación empresarial, que de hecho han experimentado un descenso constante desde 2020».
Según los expertos del IMD, los principales desafíos que tiene que solucionar la economía española están relacionados con la gestión eficiente de los fondos europeos para fortalecer el sistema productivo y configurar una economía resiliente; el impulso de la digitalización y la investigación; mejorar la empleabilidad de los trabajadores replanteando las políticas de empleo en el marco del diálogo social; la gestión de la inflación de manera que no perjudique la competitividad y el fortalecimiento de la industria replanteando las cadenas de distribución. Como se puede comprobar, son capítulos muy importantes en los que el Gobierno tiene mucho que mejorar.
La inflación es la principal preocupación
La inflación está afectando notoriamente a las empresas y a las economías de los países, y esa circunstancia se nota claramente en la encuesta realizada a los ejecutivos. La inflación es la principal preocupación para el 50 % de los ejecutivos encuestados. El 49 % menciona los conflictos geopolíticos y el 48 % los cuellos de botella en la cadena de suministro. La perspectiva de una presencia prolongada de la covid ocupa el cuarto lugar. La mencionan el 43 % de los ejecutivos encuestados.
