Inflación Irlanda, otra lección para Sánchez: cómo recaudar más con impuestos bajos
Su Impuesto de Sociedades es uno de los más bajos dentro de la Unión Europea, situándose en un 12,5 %
Irlanda es un país que crece. Uno de sus secretos es la importancia del beneficio que generan las grandes multinacionales, gracias a la pandemia, en suelo celta. Mientras la media de expansión, en el segundo trimestre, de los países Unión Europea ronda el 0,7 %, Irlanda alcanza el 6,3 %.
Para entender el buen momento que atraviesa Irlanda es necesario hacer un pequeño paréntesis y hablar sobre los beneficios caídos del cielo que tiene el país. Los beneficios caídos del cielo son aquellos en los que un Estado se aprovecha de la situación y recibe dinero sin tener que hacer nada, o muy poco. Estos se suelen reflejar en las inyecciones de dinero que reciben las arcas estatales gracias a las ganancias extra de las grandes empresas.
Mientras el resto de los países europeos se encuentran en una situación complicada y tratan de recaudar beneficios de las compañías energéticas y financieras, Dublín encuentra su recompensa en las farmacéuticas y tecnológicas.
Según el Financial Times, el Estado irlandés recauda cerca de 8.000 millones en concepto de impuesto a empresas. Gracias a la actividad de los sectores anteriormente mencionados, la Hacienda del país anglosajón aumentó un 30 % su recaudación el año pasado. Dato sorprendente ya que el Impuesto de Sociedades es uno de los más bajos dentro de la Unión Europea, 12,5 %. Encontrándose la media continental por encima del 20 %.
Los riesgos de la economía irlandesa
Sin embargo, el tigre celta cuenta con una economía que asume ciertos peligros. Con relación al Impuesto de Sociedades, cerca de la mitad de los 13.500 millones de euros recaudados en 2021 llegó de diez empresas. El peligro de depender de empresas como Apple, Google o Intel es que, si estas sufren un mal año, la economía se resentiría sin ningún remordimiento.
Las diez multinacionales «irlandesas»
- Apple
- Intel
- Meta (Facebook)
- Amazon
- Pfizer
- Yahoo
- Ebay
- IBM
Aunque actualmente el Gobierno irlandés se esté planteando aumentar los impuestos a las empresas energéticas, esta medida no se tendría que catalogar como urgente. El principal motivo es que el dinero aportado por las grandes empresas, residentes en el país, puede ayudar a paliar la crisis que se avecina.
La inflación es otro de los «puntos calientes» de la economía irlandesa, situándose cerca del 9 %. El mercado inmobiliario es uno de los más caros del país. Algunos expertos comentan que si Irlanda no está dentro de una burbuja, poco le falta. Los irlandeses reconocen que los sueldos son buenos. Sin embargo, el precio de las viviendas, encarecidos por el precio de la energía, es tan alto que resulta muy complicado acceder a las hipotecas.
El «milagro irlandés»
En el año 2020, en plena pandemia y con el mundo paralizado, el PIB trimestral de Irlanda descendió un 5 %. En el resto de los países, la bajada fue, como mínimo, el doble. Y no solo eso, la recuperación de Dublín fue la más rápida de la Unión Europea. Estos números fueron posibles gracias al balón de oxígeno que supusieron las multinacionales. Tanto el empleo generado, y mantenido, como el dinero que aportaban a las arcas fueron clave para capear el temporal que se ha generado y del que parece difícil salir.
En el año 2021, el Banco Central de Irlanda tasó en 8.000 millones la aportación de estas compañías a la Hacienda pública
La economía irlandesa podría definirse como volátil y cíclica, ya que depende directamente del buen «estado de forma» de las grandes empresas internacionales. Aunque no se augura que en un futuro próximo estas sufran un bajón, tampoco se esperaba hace un lustro que fuesen a aportar tanto dinero.
En el año 2021, el Banco Central de Irlanda tasó en 8.000 millones la aportación de estas compañías a la Hacienda pública. En lo que va de año, estas empresas han generado ya alrededor de 9.000 millones de euros.