Así son las etiquetas con las que la UE quiere que ahorremos energía
Desde Europa, los máximos representantes lanzan un aviso e insisten en la necesidad de emplear energías renovables
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen lanzó un mensaje el pasado lunes a todos los países de la Unión Europea de la necesidad de invertir en energías renovables para disminuir la dependencia del gas ruso. Además, instó a los ciudadanos a reemplazar sus electrodomésticos por otros nuevos más eficientes.
Nuevo etiquetado
El nuevo etiquetado de productos eléctricos elimina las clases energéticas A+, A++ y A+++, volviendo a una escala de clasificación que va de la A a la G. En ella, la A hace referencia a los productos de menor consumo y mayor eficiencia energética y la G engloba a aquellos de mayor consumo y menor eficiencia energética. De esta forma, la etiqueta mantendrá siete clases de eficiencia energética.
Asimismo, todas las nuevas etiquetas llevarán incorporado un código QR exclusivo para que el consumidor pueda acceder a través de su dispositivo móvil a las características y datos específicos de cada modelo dentro de la base de datos a escala europea denominada EPREL (European Product Database for Energy Labelling).
«La energía renovable nos hace más independientes del gas ruso. El año pasado, añadimos 34 gigavatios de capacidad de energía renovable al mix energético de la UE, ahorrando así 7.000 millones de metros cúbicos (bcm) de gas natural. Todos los países de la UE deben hacer esfuerzos en este área y aprovechar las oportunidades de inversión del plan 'Repower EU'», escribió en su cuenta de Twitter la presidenta.
De esta forma, las reglas europeas sobre diseño ecológico y etiquetado energético dirigirán al consumidor hacia opciones mucho más eficientes que harán posible el cambio.
Ahorro de energía
En el mes de mayo, la Comisión Europea presentó el Plan para poner fin a la dependencia de la UE con respecto a los combustibles fósiles rusos (REPowerEU). Este proyecto es su respuesta a todas las dificultades que está experimentando el mercado mundial por la guerra en Ucrania.
Sus principales objetivos son poner fin a la dependencia de los combustibles fósiles rusos, hacer frente a la crisis climática y reemplazar los electrodomésticos ineficientes para lograr un menos consumo.
El 85 % de los europeos cree que la UE debería reducir su dependencia con respecto al gas y el petróleo rusos lo antes posible para apoyar a Ucrania. Las medidas de este plan responden a la necesidad de ahorrar energía, diversificar el suministro y acelerar el uso de renovables.
Von der Leyen afirma que con esta progresiva transformación ecológica se reforzará el crecimiento económico, la seguridad y la lucha contra el cambio climático en favor de Europa y de sus socios.