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El Debate

Batalla fiscal Gobierno - CCAA

El mapa de la fiscalidad en España: ¿en qué comunidades se pagan menos impuestos?

La Comunidad Valenciana es la región que menos bonifica el impuesto de sucesiones y la que más grava a las rentas altas. Madrid destaca por la supresión del tributo al patrimonio y por su reducida presión sobre las rentas más bajas

El debate sobre la desigualdad en el pago de impuestos en España vuelve a estar sobre la mesa. El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha propuesto recentralizar la política fiscal para evitar que los gobiernos regionales compitan entre sí a través de rebajas en los impuestos autonómicos.

El melón lo ha abierto Juanma Moreno en Andalucía al anunciar la supresión del impuesto sobre el Patrimonio en 2023 y la deflactación del 4,3 % en los tres primeros tramos de la tarifa autonómica del IRPF.

Esta decisión pone en evidencia las diferencias en el sistema de reparto de impuestos autonómicos que llevan a que ciudadanos de ciertas comunidades paguen miles de euros más a causa de un gravamen más estricto.

Impuesto sobre el patrimonio

Andalucía ha seguido el camino marcado por Madrid y bonificará el 100 % del impuesto del patrimonio el próximo año. Este gravamen, establecido en 1977 con carácter «extraordinario» y cedido a las comunidades autónomas, fue recuperado en 2011 para obtener «una recaudación adicional» ante la crisis financiera de 2008. España es el único Estado miembro de la Unión Europea en el que se paga este tributo. También se mantiene en vigor en países como Liechtenstein, Noruega o Suiza.

Además de Madrid y Andalucía, otras cinco autonomías han establecido bonificaciones sobre este impuesto. Galicia aplica desde este año una reducción del 25 % en la cuantía a pagar por las grandes fortunas, mientras que Asturias, Aragón o Cataluña establecen una rebaja del 99 % para el patrimonio de los contribuyentes con discapacidad.

La bonificación también afecta a los bienes de consumo cultural en Baleares (90 %) y a las propiedades forestales en Cataluña (95 %).

Impuesto de sucesiones y donaciones

Este tributo grava la transmisión del patrimonio tras la muerte de una persona. Todas las autonomías ofrecen ventajas fiscales a los parientes más cercanos al fallecido, aunque su cuantía y condiciones varían entre territorios.

La reducción más importante la aplica Cantabria, donde los hijos, los padres o el cónyuge del fallecido no tienen que pagar ningún impuesto al recibir la herencia. Tampoco necesitan hacerlo las personas con una discapacidad igual o superior al 65 % en Asturias.

En la mayoría de comunidades la bonificación para los familiares directos llega a alcanzar el 99 %. Es el caso de Extremadura, Madrid, Castilla y León o la Región de Murcia. Por el contrario, en la Comunidad Valenciana solo se aplica una rebaja del 75 % para los descendientes menores de 21 años y del 50 % para el resto de parientes cercanos.

Impuesto sobre sociedades

El impuesto sobre sociedades, que está transferido a las comunidades y que las empresas pagan los beneficios obtenidos en su actividad, se sitúa en el 25 % –15 % para las empresas de nueva creación– en todas las comunidades del régimen general. Navarra y País Vasco, por su régimen foral, establecen un tipo impositivo del 24 y del 28 % respectivamente.

El gravamen del 25 % tiene varias excepciones: las compañías acogidas al Régimen Económico y Fiscal de Canarias solo tributan al 4 %, mientras que las que están afincadas en Ceuta y Melilla pueden deducirse el 50 % de la cuota correspondiente a los rendimientos obtenidos en las ciudades autónomas.

IRPF

El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es un tributo que grava de manera progresiva la obtención de la renta de las personas residentes en España. Este impuesto estatal está parcialmente cedido a las comunidades, que pueden introducir cambios en los tipos y en el número de tramos.

Así, la Comunidad Valenciana es la región que impone el mayor gravamen a las rentas más altas (29 %), seguida de La Rioja (27 %) y Canarias (26 %). En el extremo opuesto, la Comunidad de Madrid (21 %), Castilla y León (21,5 %) y Galicia (22,5 %) son los territorios con las tasas más bajas para este grupo de contribuyentes.

La rebaja fiscal acometida por Cataluña no le impide seguir siendo la comunidad con el IRPF más alto para las rentas bajas (12 %), mientras que Madrid, Canarias y La Rioja se sitúan como las autonomías que ejercen menor presión impositiva sobre la población con bajos ingresos (9 %).

El debate sobre las desigualdades en materia fiscal surge después de que tres comunidades gobernadas por el PP –Castilla y León, Madrid y Andalucía– hayan anunciado en las últimas semanas la aprobación de paquetes de medidas fiscales que implican la rebaja y deflactación de las tarifas de determinados tramos del IRPF.