El pan, más caro que nunca en la Unión Europea

El precio del pan continúa su escalada. Las consecuencias de la invasión rusa de Ucrania, y los problemas en la salida de cereales procedentes del país en guerra dispararon su coste un 18 % el pasado agosto, con respecto al mismo mes del año anterior, según Eurostat.

El recrudecimiento del conflicto ha provocado un shock en la oferta de trigo, maíz y cebada, que ha puesto en aprietos a países como España, que cuenta con una gran dependencia de las importaciones ucranianas. Tras Turquía, el nuestro es el segundo mayor receptor de esta materia prima, imprescindible para la elaboración de pan.

La guerra no solo está frenando la salida de cereales, una gran parte de los campos de cultivo ucranianos se han visto devastados por la contienda. «Hay una enorme cantidad de superficie cultivable que está siendo afectada por la guerra y que en gran parte está siendo destruida», aseguró Mª Cruz Díaz, presidenta de la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos, en una entrevista concedida a El Debate.

Díaz advierte de que no solo se disparará el pan, sino todo todos los productos que dependen del cereal, como por ejemplo la carne. «Los más afectados serán los productos ganaderos, pero también los producidos a partir del girasol, y también al aceite de oliva», dice.

A la caída de las importaciones, se suma el resultado de la sequía sufrida durante los meses de verano, que han hundido la producción nacional.

Hungría es el miembro de la Unión Europeo que más está sufriendo el cuello de botella en el suministro de cereales. El precio de la barra de pan ha subido un 66 %. Lituania, Estonia y Eslovaquia cuentan con incrementos de precio superiores al 30 %.

Desde la asociación de Ingenieros Agrónomos recuerdan que las revueltas derivada de la Primavera Árabe, tuvo su origen en una subida de los precios de los alimentos básicos tras una de las peores cosechas que han tenido lugar en Egipto.