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Las rebajas fiscales de Portugal ya fueron un aliciente en el pasado para muchos españoles

Impuestos

Fuga de españoles a Portugal para evitar el frenazo económico de Sánchez

El socialismo luso hace rebajas fiscales para incentivar el tejido empresarial del país

Mientras España se enzarza en una batalla impositiva que la ministra Montero terminó por enfangar con sus rebajas fiscales a mayor gloria de su partido, el gobierno de Portugal ha decidido atraer el tejido empresarial de otros países a su territorio.

En España se les pide a las empresas que arrimen el hombro. Es una forma de sacarles más dinero de sus beneficios o de sus ingresos y que se las arreglen para pagar nóminas, seguros sociales, impuestos y generar beneficios.

Más incentivos

António Costa, presidente de Portugal, ha apostado, por lo contrario. Desde su ideología socialista, Costa ha reforzado los incentivos para que las empresas creen empleo y revaloricen los salarios.

El Impuesto de Sociedades sigue a la baja y los tramos de IRPF no se mueven para garantizar que los portugueses tienen dinero y se lo pueden gastar en lo que consideren oportuno mientras muevan la economía.

Portugal dejará de ingresar unos mil millones de euros anuales hasta 2026 por este plan de alivio fiscal. La medida no pondrá el riesgo su economía y es una llamada de atención a las empresas y residentes en el país de que no tributarán más de 20 %.

Los españoles que se han marchado a Portugal bajo el mandato de Pedro Sánchez supera al de Mariano Rajoy. Si con Montoro como ministro de Economía había 12.600 emigrados, con Montero superan los 15.500, es decir, un 23 % más.

Andorra

España se ha convertido en un país donde es muy difícil prosperar con un negocio y eso provoca fugas a lugares como Andorra o Luxemburgo, donde también aumenta un 20 % los españoles que han cambiado su residencia.

Las rebajas fiscales españolas apenas afectarán a las rentas medias, las que mantienen el país con sus sueldos. Todo va para las empresas y para los 'ricos', como dice el Gobierno, a quiénes ha decidido exprimir, mientras que en Portugal prefieren convencerles para que sigan creando empleo y riqueza.