Un recargo del 25 %: la letra pequeña de la nueva tarifa para comunidades con calefacción central

El plan del Gobierno para proteger a los consumidores de energía de la tormenta de los precios entra en vigor. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica el Real Decreto con el que el Ejecutivo busca amortiguar el impacto que la crisis de la energía promete para los bolsillos de los más vulnerables. El documento busca -además- reducir el consumo de gas en línea con lo acordado en Bruselas. Sin embargo, la norma cuenta con varios rincones en los que se esconde la letra pequeña.

Una de las medidas más destacadas –y que más consecuencias oculta– es la que apunta a las comunidades de vecinos con calefacción central. El texto permitirá a 1,7 millones de hogares beneficiarse de la nueva tarifa de último recurso (TUR) hasta finales de 2023. Deberán ser las propias comunidades las que pidan a sus comercializadoras acogerse a este mecanismo que permitirá que estos consumidores accedan a un recibo menor, pero con varios condicionantes.

Penalización para los que no tengan contador individual instalado

Si la comunidad de vecinos no ha instalado contadores individuales antes de finales del mes de septiembre de 2023, deberá una parte del beneficio conseguido. En concreto se verán penalizadas con el 25% del ahorro que hayan acumulado desde que se acogieron a la nueva tarifa.

Sólo 400.000 hogares han instalado los nuevos contadores

Según los datos que maneja el Ejecutivo, solo 400.000 hogares han instalado un contador individual en sus radiadores de calefacción central. El texto impone una prórroga, pero deja fuera de la obligación a aquellas viviendas en las que no sea técnicamente posible.

Recargo para los que aumenten el consumo de años pasados

No es la única traba que los vecinos tendrán para poder acceder a la ventaja aprobada. La norma establece una penalización a aquellas comunidades que superen el gasto medio de los últimos cinco años.

Es decir, si las viviendas gastan más, se les impondrá un recargo del 25 % que se sumará a lo pagado a través de la nueva tarifa. El objetivo de Transición Ecológica es garantizar el ahorro energético.

No obstante, aquellos edificios que durante los últimos años hayan tenido viviendas desocupadas, podrían verse penalizadas. Además, si las condiciones climáticas son más duras este invierno, las comunidades podrían caer en un mayor consumo.

Financiada vía Presupuestos

El Gobierno financiará a través de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) el déficit generado por los límites al incremento de la factura del gas natural para la nueva Tarifa de Último Recurso (TUR) de ahorro vecinal para las calderas comunitarias, así como por la prórroga de las condiciones vigentes para los consumidores domésticos de la TUR 1 y TUR 2 para limitar la subida en sus recibos del gas en un 5 %, que estarán en vigor en ambos casos hasta finales de 2023.

El Consejo de Ministros ha aprobado este el Real Decreto-ley de ayudas que movilizará 3.000 millones de euros de los PGE para rebajar la factura energética de un 40 % de los hogares del país ante el impacto de la crisis.