La ministra de hacienda, María Jesús Montero.
El Gobierno introduce el impuesto a las grandes fortunas como enmienda al de la banca
Tendrá tres tramos que gravarán los patrimonios a partir de 3 millones de euros
El Gobierno va a tramitar el impuesto a las fortunas de más de 3 millones de euros como enmienda parcial al proyecto de ley que regula los gravámenes temporales a la banca y a las empresas energéticas.
Según han confirmado a EFE fuentes del grupo parlamentario de Unidas Podemos (UP), se trata de una enmienda conjunta del PSOE y UP que se registrará este jueves antes de que a las 14:00 horas acabe el plazo para presentar las enmiendas parciales al mencionado proyecto de ley.
El impuesto a las grandes fortunas, anunciado por el Gobierno en el marco de los presupuestos de 2023, tendrá carácter temporal –ya que estará en vigor en 2023 y 2024–, será deducible del impuesto de patrimonio y tendrá tres tramos que gravarán los patrimonios a partir de 3 millones de euros.
La medida, pactada por los socios del Gobierno el pasado mes de septiembre, contemplaba un tipo del 1,7 % para patrimonios de entre 3 y 5 millones, del 2,1 % para patrimonios de entre 5 y 10 millones y del 3,5 % para patrimonios de más de 10 millones de euros.
Entonces se calculó que podría recaudar 1.500 millones en dos años, antes de deducir lo pagado por el impuesto de patrimonio. Además del impuesto a las grandes fortunas, las enmiendas del PSOE y UP podrían incluir también la limitación a la compensación de pérdidas de filiales dentro de los grandes grupos consolidados.
Esta medida fue acordada también entre los socios del Gobierno para los presupuestos de 2023 e implica que en 2023 solo se podrán compensar el 50 % de las pérdidas de filiales, pudiendo aplicar el resto en 2024.
Con ello se incrementará la recaudación en 2.439 millones y solo afectará a 3.609 empresas, un 0,2 % del total.
La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha señalado que el PP «ya no sabe qué excusa encontrar» para «justificar que no comparte que en este momento tan complicado para los ciudadanos es necesario pedir un esfuerzo superior a las energéticas, que están teniendo beneficios extraordinarios, a la banca, que está teniendo ganancias, o a los grandes capitales».
