España ha generado un déficit de 1 billón 107.000 millones desde la crisis de 2008

Me hacían una pregunta la semana pasada sobre si la economía española puede quebrar. Mi repuesta fue automática: la economía española no va a quebrar; lo que va a quebrar es el Estado español, que son dos cosas completamente diferentes.

Si en lugar de llevar en este siglo 13 años de gestión socialista y 9 años de gestión de la derecha, hubiese llevado 22 años de gestión de la derecha, otro gallo le cantaría a la economía española, y otro gallo le cantaría al Estado.

La economía española ha sido capaz de proporcionar al Estado español la descomunal cifra de 6.568.000 millones de euros de ingresos, es decir, 6,5 billones, para que el Estado español los administrase, los gestionase y proporcionase a los españoles todos los servicios necesarios, para mantener una economía del bienestar, con su sanidad, su educación, sus pensiones, su policía y guardias civiles, su ejército, su justicia y todos los otros servicios necesarios.

Lo malo es que los gestores del Estado español han sido un auténtico desastre. Aznar dejó una economía en lo alto de la cresta. Tal es así que Zapatero se volvió loco y empezó a decir que sobrepasaríamos a Italia y sacar pecho, con unas cajas de ahorro que se estaban dedicando a negocios que no eran el suyo y con la crisis saltaron por los aires con la ayuda del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordoñez.

Entre este siniestro personaje y el socialista bolivariano Zapatero, le empaquetaron una economía en crisis, por culpa de las cajas de ahorro, y un Estado quebrado, a Mariano Rajoy, que en lugar de cantar «toda la porquería del Estado» que le han dejado, decidió callar y tratar de salvar los muebles del Estado evitando una intervención que estuvo a punto de pasar.

Cuando la economía se recuperó, en lugar de coger la sartén por el mango, se dedicó a templar gaitas en su partido en las luchas de poder de dos mujeres, con dos posiciones antagónicas en cuanto a la visión del Estado, que no de la economía, y, en lugar de aprovechar la coyuntura, realizar una reforma profunda de la administración y reducir 60.000 millones al año el gasto, se durmió en los laureles y siguió gastando más de lo que ingresaba.

Le ponen de patitas en la calle, siendo el primer presidente cesado por una moción de censura y llega al poder un tramposo illuminati que, con todo su doctorado falsificado, su famoso intento de hacer trampas en una votación interna de su partido y con sus famosas negaciones, ha llevado al Estado al borde de la bancarrota, que no a la economía, que sigue funcionando, pagando más impuestos que nunca, pero lista para un cambio de timonel.

Eso sí, a la espera de que el nuevo timonel se ponga manos a la obra y baje en 2024 entre 50.000 y 60.000 millones de gastos inútiles y la misma cifra en 2025 para dejar un Estado alemanizado de los buenos momentos.

Y digo alemanizado porque hoy vamos a ver desde el 2008 al 2022, en porcentaje del PIB y en valor absoluto, el déficit que ha generado España y el que ha generado Alemania, y vamos a ver que Alemania también ha pasado crisis, que ha tenido déficit, pero que en los años de bonanza sus gobiernos generan superávit, utilizando los impuestos para mantener la economía del bienestar de su país, pero aprovechando la coyuntura para reducir deuda y estar en mejor situación, si ocurre una desgracia como la pandemia, o como la de un gestor inútil e incompetente al que se le acompañará a la puerta en las próximas elecciones, por culpa de gobernar con verdes, que es lo mismo que gobernar con comunistas.

Pero veamos qué ha pasado a España y qué ha pasado a Alemania:

España no ha generado superávit ni una sola vez en estos 15 años, mientras que Alemania ha sido capaz de hacerlo en 8 años seguidos, desde el 2012 al 2019 incluidos.

España ha generado en 15 años un déficit medio del 5,78 %, que está 2,78 puntos porcentuales fuera del plan de convergencia de Maastricht, mientras que Alemania se ha quedado en un 0,78 % de déficit superando dos crisis como la financiera y la pandemia más la guerra de Ucrania.

España es un país mucho más pequeño que el alemán. Nuestra economía es 1/3 de la alemana y el Estado español ha generado 1.107.000 millones de déficit, mientras que los alemanes, que son económicamente 3 veces más potentes, han generado 1/3 del déficit español, quedándose en 353.000 millones.

Y si miramos solo el efecto Sánchez, este ha generado 313.649 millones de déficit, mientras que Alemania ha necesitado 297.147 millones.

Y vuelvo a la pregunta inicial y vuelvo a responder lo mismo. No, la economía española no va a quebrar, no será tan grande ni tan sólida como la alemana, pero aguanta mucho más de lo que Yolanda Díaz quiere.

Lo que puede quebrar es el Estado español si llega otro cuatrienio de Pedro Sánchez con Yolanda Díaz, con ERC y Junts apoyando al Gobierno para desestabilizar el Estado, sustentados por los asesinos de ETA blanqueados y que quieren la independencia del País Vasco. Tienen garantizada la quiebra política, pero antes de que esta llegue, viene la catarsis de la incapacidad de seguir gastando, en el momento que la UE nos levante la mano al déficit y los mercados nos digan que no nos prestan más y que el BCE lo más que pueda hacer sea exigir bajadas automáticas de gasto.

Nuestra economía no se parará, pero generará, como en la época de Zapatero, 6 millones reales de parados, a los cuales no podremos pagar por problemas de solvencia, a causa del déficit acumulado y las pensiones saltarán por los aires, porque nadie habrá querido atacar el problema y entonces lo que sí sucederá que será la quiebra.

El resultado siguiente se lo dejo a los analistas políticos. Un Estado no puede sostenerse de por vida teniendo que pedir prestado para aguantar.

Un Estado no puede generar un déficit de 1,107 billones de euros en 15 años y 313.649 millones en 4 años y medio y a su actual gobernante pensando en gastar más y subido en su moto.