Los empleos que más cuesta cubrir en España
El 75 % de las empresas de nuestro país tienen problemas para cubrir sus puestos a pesar de la alta tasa de desempleo
El mercado laboral español es particularmente complicado en comparación con nuestro entorno, según destaca el informe Necesidades del mercado de trabajo elaborado por Adecco. Aunque uno de cada cinco desempleados de la UE reside en nuestro país, el 75 % de las empresas tienen problemas para cubrir sus puestos.
En el primer trimestre del año, España tenía 16.161.122 puestos ocupados por 143.428 vacantes, lo que supone una tasa de vacantes de empleo del 0,9 %, 1,9 puntos porcentuales por debajo de la media. Es normal que los países con bajo nivel de desempleo tengan mayores niveles de vacantes, pero el caso español es único ya que comparte una tasa muy alta de paro con importantes tensiones en la cobertura de vacantes.
Como explica Javier Blasco, director de The Adecco Group Insitute, con los datos del Eurostat, en España no habría un problema de vacantes: «Pero sí que lo hay o, mejor dicho, hay un problema mayor porque las tensiones entre oferta y demanda no sólo vienen de la escasez del talento necesario, sino que debe sumarse la escasez del talente disponible, o en algunos casos, del talento dispuesto a aceptar un empleo o que esté capacitado para el mismo».
Esto tiene que ver con la escasa activación de nuestro mercado de trabajo y los problemas de cualificación, «por tratar de empezar a dar pistas sobre aquello que se viene llamando la paradoja del mercado de trabajo español», añade.
En lo que va de año, los puestos cuya cobertura es más difícil de cubrir se encuentran en la división de actividad económica de transporte y almacenamiento (18 %), industria (16 %), servicios técnicos de arquitectura e ingeniería (11 %) y actividades de las sedes centrales (11 %). Por el contrario, las actividades de consultoría (0,1 %), jurídicas (0,2 %) y de seguridad (0,4 %) son las que menos problemas sufren.
Atracción y retención de talento
España sufre graves problemas en la atracción y retención de talento. Blasco apunta a que «la flexibilidad y el teletrabajo permitirán que muchas organizaciones se reubiquen donde se concentre el talento».
«Las preferencias de los profesionales más demandados ya no tienen que ver solo con el salario, la escasez de profesionales y el envejecimiento de la población exigen que la cultura de la inserción, retención, recualificación y compromiso, pongan en el centro a las personas si no queremos fracasar en el intento», comenta.
Por ello es clave la formación y una nueva normativa sobre formación focalizada en la empleabilidad de los títulos, la orientación práctica y el mayor contenido en competencias. Sin embargo, la nueva ley de FP o el proyecto de estatuto del becario corre el riesgo de overbooking de estudiantes para el acceso a las prácticas y que más de un millón de estudiantes de grado o FP no puedan obtener sus títulos.
«Si atendemos al diagnóstico de la OCDE sobre nuestro sistema educativo, parece que sólo hay un camino por el que avanzar y tenemos muchos deberes por hacer», concluye Blasco.