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Los peajes están en el aire hasta que la Comisión se pronuncie tras la petición del Gobierno de eliminarlos para 2024

Plan de Recuperación

La Comisión no aprueba todavía la petición de España sobre eliminar los peajes de las principales vías

Informa de que está estudiando la solicitud del Gobierno para eliminarlo de su plan para 2024 después del revuelo creado por esta medida

Fuentes de la Comisión Europea han comunicado este jueves que la propuesta del Gobierno de Pedro Sánchez para eliminar los peajes en las principales vías automovilísticas españolas está estudiándose.

De esta manera niega las informaciones vertidas en las últimas horas desde determinados medios que anunciaron la propuesta como aceptada cuando lo que está haciendo la comisión es estudiarla, según han informado.

Lo que ha propuesto el Ejecutivo español es eliminar los peajes a cambio de incentivar ciertas medidas de protección medioambiental como el incentivo del ferrocarril y otros transportes sostenibles y de menor impacto.

Bruselas ha admitido que esta propuesta se enmarca en el Plan de Recuperación necesario para que el Gobierno pueda cobrar cerca de 8.000 millones de euros en ayudas directas y más de 80.000 millones en préstamos.

«Se han logrado avances positivos y las discusiones constructivas con las autoridades españolas están en marcha con vistas a finalizar en análisis lo antes posible», añadió la portavoz de Economía, Veerle Nuyts, quien indicó que Bruselas comunicará la conclusión de su examen «tan pronto como llegue a este punto».

El compromiso de los peajes -propuesta española a pesar de ser achacada a Europa por el Gobierno- consta en el plan de recuperación español dentro del hito número 3, según el cual España debe crear «un mecanismo de pago por el uso de las carreteras del Estado, que comenzará a funcionar a partir de 2024, con arreglo al principio de «quien contamina paga».

Por otro lado la Comisión ha decidido no pronunciarse al ser preguntada sobre si este tipo de medidas que afectan al bolsillo de los ciudadanos son las deseables para desincentivar el uso de vehículos privados o si se pueden entender como «impuestos verdes», una de las vías que contempla la Comisión para recaudar más de cara a financiar la ayuda a Ucrania.