El auge de la hipoteca mixta ante la subida de tipos: por qué este formato gana adeptos
Aunque la más demandada continúa siendo la fija, hay expertos que ven más interesante este otro tipo
El euríbor se acerca a máximos de 2008 y cierra septiembre en el 4,15 %
La hipoteca se ha convertido en un quebradero de cabeza aún mayor con la subida del euríbor, el índice al que se referencian las de tipo variable. Llevábamos un tiempo mal acostumbrados a los tipos de interés cero y su subida fulgurante se ha traducido también en un incremento veloz del euríbor que ha disparado el coste de las hipotecas de tipo variable, el 40 % de las que se contratan actualmente en España.
En este contexto de incertidumbre la hipoteca mixta, con un formato a caballo entre la fija y la variable, no para de ganar adeptos. En la actualidad, el 28 % de las hipotecas que se firma a través de Rastreator es de tipo mixto. El 69 % es fijo, y el 3 % restante, variable. Desde el comparador financiero constatan que hay un auge claro de esta tipología.
«Me parece un producto excepcional», explica Sergio Carbajal, responsable de Hipotecas de Rastreator, dada la coyuntura del mercado. «Permite cubrirse del periodo alcista de precios con un tipo de interés más bajo de lo normal, y luego ya analizas qué haces. Si en diez o quince años el euríbor sigue alto, te planteas un cambio de hipoteca en mejores condiciones antes de que empiece el periodo variable. Si ha bajado, empiezas a disfrutar de la vida pagando un euríbor más bajo de la fija que estabas pagando. Podemos tener hipotecas mixtas a cinco o diez años al 2,60 % o 2,65 %, y en el periodo variable euríbor +0,50, +0,70. Si tuviera que hacerme una hipoteca ahora, me haría una de estas».
El 90 % de los compradores recurre en la actualidad a comparadores financieros, que constatan cómo en los últimos meses ha subido el interés en la consulta de las webs que comparan hipotecas. Webs como Rastreator responden en menos de quince minutos a la mayoría de los clientes que les han contactado para pedirles asesoramiento.
Como consecuencia, las hipotecas que se tramitan a través de Rastreator, Idealista o iAhorro va creciendo. En concreto, ya son unas 3.500 al mes, entre el 10 o el 11 % del total del mercado.
Poca cultura de cambio
Para el banco también es una ventaja, porque el ratio de conversión es mayor: en Rastreator se firman 25 de cada 100 hipotecas que se consultan, mientras que en un banco formal están entre 9 y 11. Tras la consulta inicial, en Rastreator la hipoteca se firma en un mes y medio. Ellos no cobran nada al cliente final. El banco les paga una comisión por cada hipoteca que se contrata proveniente de su web.
En España no hay mucha cultura de cambio de hipoteca, algo que a Carbajal le parece un error. «Lo hacen solo el 27 % de los clientes, cuando puedes generar mucho ahorro. Puedes ahorrar 200 euros al mes, y con eso puedes hasta comprarte un coche», indica.
La penalización por cambiar ronda el 1,5 % del coste de la hipoteca, aunque Carbajal estima que merece la pena. También hay entidades que no penalizan el cambio. En su web se firman las hipotecas a una media del 3 %.