La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz.
Yolanda Díaz dice que las distribuidoras de alimentación se «forran», pero ganan menos de 3 euros de cada 100 que venden
Pide un impuesto para gravarlas, algo que haría subir los precios de los productos
la vicepresidenta segunda del Gobierno, ministra de Trabajo y líder de Sumar Yolanda Díaz aseguró el sábado en Córdoba que había «llegado el momento» de diseñar un impuesto que gravara a las grandes empresas distribuidoras de alimentación, entre las que se encuentran compañías como Mercadona, Carrefour o El Corte Inglés, entre otras.
Díaz señalaba que estas empresas son las que se están «forrando», mientras que muchas familias no pueden asumir el coste de la cesta de la compra y, por ello, afirmaba, hay que diseñar un nuevo impuesto que haga que los que más dinero están ganando, paguen.
La solución, sin embargo, no parece lo más apropiada. Aunque es cierto que una empresa como Mercadona ganó en 2023 1.000 millones de euros, un 40 % más que el año anterior, lo logró ajustando al máximo los costes de su negocio, pagando a sus empleados mejor que nadie en su sector y gracias a su gran volumen de ventas. Es falso que sus beneficios se deban a unos márgenes grandes o escandalosos: Mercadona gana 2,84 euros por cada 100 euros que vende, algo por encima de la media del sector, que está en 2,5.
La solución para bajar los precios o mantenerlos en su estado actual no sería gravar a las principales distribuidoras de alimentación. Como reconocía el presidente de Mercadona, Juan Roig, en la presentación de resultados de la compañía en marzo, «cuando el IVA sube, subimos los precios. Han bajado los precios cuando han bajado los costes». Como cualquier negocio, tiene que amoldar sus precios a sus costes para poder pagar a sus empleados y ganar todo el dinero que pueda para seguir invirtiendo, creciendo y mejorando sus productos. En febrero de 2023 y abril de 2024, Mercadona bajó los precios de 1.000 productos y los incrementó en chocolates, pastas, aceite de oliva y arroz por el aumento de coste de las materias primas.
Sobre la vigilancia de los precios y el papel del Observatorio de Precios de los Alimentos, Roig señala que «lo que más vale es la competencia, no el observatorio de precios. Si te pasas con los márgenes, el competidor de al lado te pone en tu sitio». La solución no pasa por la intervención del Gobierno.
En cuanto a las críticas sobre el pago de impuestos, por seguir con el ejemplo de Mercadona, la compañía abonó en 2023 2.604 millones de euros, un 15 % más que el año anterior.
