Fundado en 1910
Los contribuyentes podrán empezar a solicitar desde este jueves, 25 de mayo, su cita previa para la atención presencial de la declaración de la Renta correspondiente al año 2022, aunque será el día 1 de junio cuando la Agencia Tributaria comenzará a asistir a los ciudadanos en sus oficinas para la confección y presentación de los documentos.

Además de la presentación por internet a través de la página de la agencia y de la aplicación móvil, los contribuyentes menos habituados a las nuevas tecnologías que requieran asistencia personalizada tienen también este año a su disposición desde principios de mayo el plan 'Le Llamamos', una alternativa a la asistencia presencial en oficinas.

El plazo de presentación de declaraciones finalizará el 30 de junio para declaraciones tanto a ingresar como a devolver, si bien el plazo en las declaraciones a ingresar con domiciliación bancaria concluirá el 27 de junio. Las solicitudes de cita previa, tanto para la atención telefónica como presencial finalizará el 29 de junio.

Está previsto que en esta campaña del IRPF se presenten un total de 22.899.000 declaraciones, un 3,4% más que el año anterior. De ese total, se prevé que den derecho a devolución un 60% de ellas --13.600.000, un 2% menos-- por un importe estimado de 9.946 millones de euros.

En total, la Agencia Tributaria prevé ingresar 16.448 millones de euros, un 5,6% más respecto al ejercicio anterior, mientras que el importe a devolver caerá un 2,4%, hasta los 9.946 millones.

CÓMO SOLICITAR EL PLAN 'LE LLAMAMOS'
En esta campaña, los contribuyentes vuelven a tener a su disposición el plan 'Le Llamamos' para confección de declaraciones por teléfono.

Este Plan arrancó el pasado 5 de mayo, con servicio hasta el final de la campaña, de manera que los contribuyentes menos habituados a las nuevas tecnologías que requieran asistencia personalizada volverán a contar con una potente alternativa a la asistencia presencial en oficinas, pudiendo acelerar la presentación y, con ello, la eventual devolución que corresponda.

Una vez que el contribuyente pide cita --se recomienda la solicitud por internet o mediante servicio automático en el 91 535 73 26, o en el 901 12 12 24-- y elige horario de mañana o de tarde, el sistema le propone un día y una hora en la que recibirá la llamada de la Agencia Tributaria.

"En favor de la propia agilidad del servicio, resulta muy conveniente que el contribuyente tenga disponible la información y documentación necesaria para realizar la declaración cuando le llame la Agencia", aconsejan desde el organismo.

Varios empleados trabajan en una oficina de la Agencia TributariaEuropa Press

Los inspectores de Hacienda avisan de que el cupo catalán «perjudicará» la lucha contra el fraude

El portavoz de la asociación de inspectores ha sostenido que, de aplicarse, este concierto «rompería los principios de igualdad y solidaridad»

El portavoz de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE), José María Peláez, ha reafirmado este miércoles que el colectivo al que representa está «radicalmente en contra» de «lo que llaman el concierto económico con Cataluña», y ha subrayado que dicho concierto provocaría «graves perjuicios» en diversos asuntos, y «especialmente en la lucha contra el fraude fiscal» y «en el funcionamiento de la Agencia Tributaria».

Así lo ha manifestado José María Peláez en una entrevista en Canal Sur Radio, en la que ha añadido que desde la asociación de inspectores de Hacienda piensan que ese «régimen nuevo» para Cataluña «es inconstitucional», porque «la Constitución regula los regímenes especiales del País Vasco y Navarra», mientras que «el resto de comunidades autónomas», incluida la catalana, queda dentro de «lo que se llama el régimen común».

En esa línea, el portavoz de la asociación de inspectores ha denunciado que «este concierto económico supone sacar a Cataluña de ese régimen común, atribuyéndole la cesión del 100% de los impuestos recaudados» en la comunidad autónoma, algo que, según ha incidido, «no está previsto ni en la Constitución ni en la ley orgánica que desarrolla el sistema de financiación de comunidades autónomas, la Lofca».

Se rompería el sistema de información tributaria básico para, por ejemplo, hacer las devoluciones de renta, los censos tributarios, comprobar las actividades económicasJosé María PeláezPortavoz de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE)

Sobre «los graves perjuicios que se producen en el funcionamiento del sistema tributario» con ese concierto, José María Peláez ha comentado que «se rompería el sistema de información tributaria básico para, por ejemplo, hacer las devoluciones de renta, los censos tributarios, comprobar las actividades económicas», además de que «se rompería el sistema de caja única».

«Pero sobre todo estamos alarmados por las consecuencias graves que se producirían en el funcionamiento de la Agencia Tributaria» con este concierto, ha continuado señalando el portavoz de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado, que ha remarcado que el acuerdo entre el PSC y ERC contempla «el traspaso de todos los funcionarios, todos los medios materiales, todos los ordenadores, todos los edificios, absolutamente todo lo de la Agencia Tributaria» estatal «a la Agencia Tributaria catalana», lo que «supone la desaparición de la agencia tributaria estatal de Cataluña, el fraccionamiento» de la misma.

Y eso, según ha abundado José María Peláez, produciría graves perjuicios económicos, sobre todo en la lucha contra el fraude fiscal, que se vería perjudicada, además de que la prestación de servicios sociales también se va a ver resentida, en tanto que la Agencia Tributaria se utiliza como un órgano vertebrador de las políticas sociales del Estado, y a través de las deducciones paga ayudas a madres trabajadoras o el Ingreso Mínimo Vital, entre otras prestaciones, según ha relatado.

Respecto a la lucha contra el fraude fiscal, ha abundado que los inspectores lo combaten «utilizando fundamentalmente la información» que existe en la base de datos de la Agencia Tributaria, y en el momento en que esto se llevara a cabo, Cataluña va a tener su propia base de datos tributaria, algo que ya ocurre en el País Vasco y Navarra, según ha apostillado.

El portavoz de la asociación de inspectores ha agregado que dicho colectivo, cuando persigue fraudes, sobre todo los sofisticados, como tramas de facturas falsas, que son investigaciones complejas y que duran mucho tiempo, no se puede distinguir entre comunidades autónomas, porque las organizaciones que se dedican a ello crean varias sociedades por distintas regiones.

En el momento que, por ejemplo, Cataluña cree su base de datos tributaria y no tengamos información de las empresas, de los administradores, de la actividad económica que se hace allí, automáticamente todas esas investigaciones se van a ver perjudicadasJosé María PeláezPortavoz de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE)

«En el momento que, por ejemplo, Cataluña cree su base de datos tributaria y no tengamos información de las empresas, de los administradores, de la actividad económica que se hace allí, automáticamente todas esas investigaciones se van a ver perjudicadas», por lo que «tenemos clarísimo que, sobre todo el fraude sofisticado, se va a ver perjudicado», según ha aseverado José María Peláez.

«Rompería los principios de igualdad y solidaridad»

El portavoz de la asociación de inspectores ha sostenido además que, de aplicarse, este concierto «rompería los principios de igualdad y solidaridad» entre españoles, de forma que «habría regiones de primera y de segunda, ciudadanos de primera y de segunda».

Ha detallado que, redondeando, Cataluña recauda actualmente de tributos propios, como Sucesiones, Patrimonio o Transmisiones Patrimoniales, unos 5.000 millones, y el Estado, con el actual sistema de financiación de comunidades autónomas, que es común e igual para todas, atribuye a Cataluña otros 21.000 millones.

«O sea, actualmente Cataluña tiene de ingresos 26.000 millones en términos igualitarios con el resto de comunidades autónomas», mientras que, con el régimen que se implantaría tras el acuerdo entre el PSC y ERC, pasaría a recaudar 53.000 millones, en tanto que se queda el 100% de los impuestos recaudados en la comunidad autónoma, justo el doble de lo que ingresa ahora, y esos 26.000 millones que deja de recaudar el Estado y que recaudaría la comunidad catalana irá «en detrimento y en perjuicio del resto de comunidades autónomas», ha advertido José María Peláez.

comentarios
tracking