El déficit según el modelo del FMI se sitúa en agosto en 38.800 millones
En algún momento, algún funcionario de este organismo debería pedir explicaciones de por qué en agosto de este año la Administración solo ha contabilizado 20.369 millones, cuando en el 2023 se llevaban una media de casi 50.000
La Intervención General de la Administración del Estado tiene a bien publicar todos los meses una información, que a su vez envía al Fondo Monetario Internacional y a Eurostat, sobre los Datos del Sector Fiscal (Operaciones no Financieras) de las Administraciones Públicas y del Estado.
«La información corresponde a las operaciones no financieras realizadas por el conjunto del sector de las Administraciones Públicas y por el Estado (Administración General del Estado), de acuerdo con los criterios de delimitación institucional y de imputación y valoración de operaciones establecidos por el Sistema Europeo de Cuentas Nacionales de la Unión Europea (SEC 2010). Revisión Estadística 2024. Los datos están adaptados a las especificaciones del National Summary Data Page (NSDP), aprobados por el Consejo Ejecutivo del FMI, normas obligatorias para todos los países que colaboran en el proyecto NEDD (Normas Especiales para la Divulgación de Datos)».
Es decir, el Ministerio de Hacienda se compromete a facilitar los datos de la Contabilidad Nacional adaptados al modelo que el Fondo Monetario Internacional exige a todos los países que colaboran en lo que se llama el proyecto NEDD, que son las Normas Especiales para la Divulgación de Datos. Esto no significa no mentir, o que la información no esté actualizada, sino simplemente a que la información sea la de la Contabilidad Nacional.
Esta precisión la hago porque lo que vamos a ver es un auténtico escándalo y lo más espectacular es que nadie se haya dado cuenta hasta ahora de la capacidad que tiene el Ministerio de María Jesús Montero para hacer lo que le da la gana con los datos oficiales.
El otro día publicaba un artículo en el que Hacienda cierra por vacaciones la «ventanilla» de los pagos, hoy debería de decir que también cierra «la ventanilla» de contabilidad, que se han ido todos los empleados públicos y que no ha quedado nadie para contabilizar y que se han cerrado las cuentas de agosto en septiembre pero sin contabilizar más allá de lo justo para que los números le queden bonitos a la ministra, que algún día nos dará un soponcio cuando se contabilicen realmente los gastos.
Y si no veamos lo que publica la IGAE y que les muestro en la siguiente tabla:
Cómo pueden ver ustedes, en agosto de 2023 se contabilizaron, como Recursos, es decir ingresos, 19.378 millones y como Empleos, es decir gastos, 41.567 millones que generaron un déficit de 22.189 millones.
En cambio en 2024, como Recursos se contabilizan 23.370 millones un 20,6 % más que en 2023, pero como Empleos sólo 20.369 millones un 50,1% menos de gastos.
¿Qué ha pasado en agosto de 2024, para contabilizar el 51 % menos que en 2023?
Pues está claro que la «ventanilla» de contabilizar, no ha estado trabajando ni en agosto ni en septiembre, en agosto estaban de vacaciones y en septiembre también o dedicados a preparar informes para ayudar a David Sánchez Pérez-Castejón, o quizás para a asistir a los cursos de Begoña.
Está claro que nos han vuelto a tomar el pelo a todos, al Fondo Monetario Internacional, a Eurostat, a Bruselas, al Congreso de los Diputados, a la oposición, que también está de vacaciones, y a todo el que no lea este artículo.
Pero a pesar de decir que en agosto España ha tenido un superávit de 3.001 millones de euros, contabilizando un 51 % menos de gasto que el año pasado, el acumulado a cierre de agosto, tampoco les sale bien si pensamos que el déficit máximo para este año es de 45.723 millones, porque incluso con las vacaciones contables del mes de agosto estamos a cierre del mes en un 85 % del total, cuando solo ha pasado el 67 % del año.
Me imagino que cuando a finales de octubre la IGAE nos dé los datos del cierre de septiembre, todavía habrá al menos «media ventanilla» cerrada, porque el mes de septiembre es uno de los meses más mirados por Bruselas que toma como indicador de cierre del ejercicio y ya se encargará María Jesús de que no llame mucho la atención para que el foco en Bruselas se coloque sobre Francia.
En algún momento, algún funcionario del Fondo Monetario Internacional debería pedir explicaciones de por qué en agosto de este año, toda la Administración del Estado, es decir, los que están bajos los Presupuestos Generales del Estado, incluyendo la Seguridad Social y las Comunidades Autónomas (sin incluir los Ayuntamientos y Diputaciones, porque estos se tardan más en consolidar), solo han contabilizado 20.369 millones de euros, cuando en el 2023 al cierre del ejercicio se llevaban una media de casi 50.000 millones al mes, o en el 2022 se llevaban 45.000 millones. A buen entendedor, ya no hacen falta más números.