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Desplome del euríbor: ¿Acertaron quienes pasaron de una hipoteca variable a una fija?

El euríbor ha pasado del 3,5 % al 2,9 %, y actualmente, los datos diarios se encuentran en torno al 2,6 %

El euríbor ha bajado más rápido de lo esperado. En apenas dos meses, el indicador que usamos para calcular las hipotecas variables ha pasado del 3,5 % al 2,9 %, y actualmente, los datos diarios se encuentran en torno al 2,6 % o 2,7 %, mínimos en dos años. De hecho, los analistas hipotecarios consideran que cerrará el año cerca del 2,5 %. Ante esta evolución, aquellos que durante el 2023 pasaron de una hipoteca variable a una mixta o de tipo fijo seguro que se están haciendo la misma pregunta: ¿ha sido acertada esta decisión?

La respuesta a esta pregunta es que a corto plazo ha sido una buena decisión, ya que «a algunas familias les permitió congelar la cuota, blindarse frente a futuras subidas y ahorrarse unos 300 euros al mes», explica Ricardo Gulias, CEO de RN Tu Solución Hipotecaria. Pero a largo plazo ha sido un «error» porque cuando tuvo lugar el boom de las novaciones —cambio de las condiciones del préstamo— y de las subrogaciones —cambio de la hipoteca de un banco a otro que ofrezcan mejores condiciones— el euríbor ya estaba muy elevado, y cuando comenzase a bajar iba a suponer una clara desventaja.

En 2023, los bancos ofrecían unos tipos de interés fijos en el entorno del 3 y el 3,5 %. Actualmente, las hipotecas variables se firman con un euríbor al 2,9 % más un diferencial del 0,5 % —se supera ese 3 %—, por lo que esa decisión continúa siendo acertada. Pero a final de año y de cara a 2025, el euríbor continuará su senda descendente y las hipotecas variables ya se encontrarán por debajo de esa cifra.

Cambio de fijo a fijo

Las hipotecas a tipo fijo están viviendo un buen momento, ya que los bancos están en una intensa competencia para atraer nuevos clientes. Tanto es así que más de 15 entidades han reducido el interés de sus hipotecas fijas desde enero hasta la fecha, y ahora es posible obtener intereses por debajo del 2,75 % o hasta el 2,5 %, un 1 % menos que hace un año.

Existe la posibilidad de que aquellos que modificaron sus condiciones hipotecarias en 2023 lo vuelvan a hacer este año, pero esto va a traer consigo el pago de una comisión de desistimiento que puede llegar a ser de un 2 % sobre el capital pendiente. «Quien lo considere conveniente, el pago lo amortizará en cuatro años», asegura Gulias.

Si, por el contrario, el hipotecado tiene un tipo mixto y quiere pasar a uno fijo, en este caso no tendría que pagar ninguna penalización. Pero Miquel Riera, analista hipotecario del comparador financiero Help My Cash, recomienda antes de realizar este cambio «comparar los tipos de interés fijos de ambas hipotecas y si le conviene recortarlo o por el contrario, esperar hasta que las tasas vuelvan a bajar».

De variable a fijo

Aquellos con una hipoteca variable ya han visto como sus cuotas han bajado. Pero a corto plazo, convertir una hipoteca variable en fija sigue saliendo a cuenta. En estos momentos, los españoles pueden conseguir una hipoteca fija en el entorno del 2,5 %, casi un punto más que el valor del euríbor más el diferencial que se establezca en el contrato. Además, da tranquilidad al hipotecado.

Sin embargo, ambos expertos hipotecarios recomiendan, si es posible, esperar a 2025, porque será cuando podremos encontrar hipotecas fijas con un interés del 1,5 %.