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La nevera es un gran consumidor de energía

La nevera es un gran consumidor de energía

Un experto energético aclara lo que consume el piloto rojo de la tele y señala al gran culpable del gasto

Los consumos fantasma, elegir electrodomésticos adecuados o contar con certificados de ahorro energético nos puede ayudar a gastar menos

Ahorrar en la factura de la luz es una de las principales preocupaciones de muchas familias en la actualidad, y para lograrlo es fundamental entender algunos conceptos clave sobre el consumo energético.

Jesús, Ingeniero Industrial y experto en eficiencia energética, comparte con El Debate sus recomendaciones para reducir el gasto en electricidad, destaca la importancia de evitar consumos innecesarios y recomienda cómo elegir los electrodomésticos adecuados, algo puede marcar una gran diferencia en el ahorro anual.

La energía más barata

Uno de los puntos clave que Jesús menciona es que «el kilovatio hora más barato es aquel que no se consume». Es decir, reducir el uso de energía en el hogar es la forma más efectiva de disminuir los gastos. Si el objetivo es pagar menos, el primer paso es consumir menos.

El kilovatio hora más barato es aquel que no se consumeJesúsIngeniero y experto energético

No se trata de obsesionarse con cada pequeño consumo, sino de evitar el uso innecesario de dispositivos y electrodomésticos que realmente no aportan valor al bienestar diario. Por ejemplo, apagar el piloto rojo de la televisión puede tener un impacto insignificante «de apenas 50 céntimos al año», por lo que no vale la pena preocuparse por él. En cambio, hay otros dispositivos y modos de funcionamiento que sí representan un gasto importante a lo largo del año.

Consumos fantasmas

Jesús destaca los llamados «consumos fantasmas», aquellos dispositivos que consumen electricidad sin que realmente se usen. Algunos ejemplos comunes incluyen el modo reposo de consolas o de otros aparatos electrónicos. «Mantener una consola en modo reposo puede parecer inofensivo, pero apagarla por completo cuando no se usa evita un gasto innecesario», aclara.

Mantener una consola en modo reposo puede parecer inofensivo, pero apagarla por completo cuando no se usa evita un gasto innecesarioJesúsIngeniero y experto energético

Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), estos consumos representan un 15 % del total de gasto anual de electricidad en los hogares. Aunque parece un porcentaje pequeño, esta cifra puede ser considerable cuando se traduce en dinero. Jesús recomienda hacer una revisión en casa para identificar esos dispositivos que permanecen enchufados sin necesidad y desconectarlos cuando no se usen.

La nevera

Jesús señala que «la nevera es el mayor consumo fantasma» en el hogar. Este electrodoméstico está en funcionamiento continuo y representa una carga importante en la factura eléctrica. En su experiencia personal, «mi nevera generaba un gasto anual de alrededor de 80 euros. Cuando tuve que reemplazarla por una avería, hice una evaluación detallada y descubrí que mi antigua nevera tenía un coste anual de 160 euros, el doble del nuevo modelo de alta eficiencia».

La nevera es el mayor consumo fantasmaJesúsIngeniero y experto energético

Para Jesús, esta experiencia refuerza la importancia de elegir electrodomésticos eficientes, pero aclara que «no decidí cambiar la nevera solo por ahorrar en la factura, aproveché la situación y opté por un modelo de eficiencia energética A o cercano»

Certificados de ahorro energético

Jesús menciona una estrategia interesante para quienes deciden invertir en dispositivos o tecnologías que ayudan a reducir la demanda energética: los certificados de ahorro energético. Estos certificados son beneficios adicionales que pueden obtenerse al realizar mejoras de eficiencia energética en el hogar. «Cuando te compras o inviertes dinero en algo que reduce la demanda energética, se pueden generar una cosa que se llaman certificados de ahorro energético (CAE) que si consigues a alguien que te los compre, es un abaratamiento que tienes en la inversión que has hecho».

Este incentivo permite, además de ahorrar en consumo, recuperar una parte del gasto realizado, lo que hace que la inversión en eficiencia sea aún más rentable. Invertir en eficiencia no solo beneficia a largo plazo en la factura mensual, sino que también puede representar un ingreso o compensación adicional.

Las recomendaciones de Jesús nos recuerdan que, si bien algunos consumos pueden ser insignificantes, reducir el gasto de energía en el hogar es posible con pequeños cambios y ajustes en el uso de ciertos dispositivos. Apagar los equipos en modo reposo, elegir electrodomésticos eficientes y aprovechar incentivos como los certificados de ahorro energético son acciones prácticas que pueden traducirse en un ahorro significativo a lo largo del año.

La clave para ahorrar está en el consumo consciente: menos consumo innecesario y más eficiencia energética en cada elección.

¿Qué es un CAE?

Un Certificado de Ahorro Energético (CAE) es un documento electrónico que garantiza que, tras llevar a cabo una actuación de eficiencia energética, se ha conseguido un nuevo ahorro de energía final equivalente a 1 kWh. De esta forma, si se acomete una actuación que implica un nuevo ahorro anual de 500 kWh, se podrán obtener 500 CAE.

Este instrumento permite monetizar los ahorros energéticos, recuperando parte del coste de las inversiones en eficiencia energética (cambio de iluminación, mejora del aislamiento térmico, renovación de equipos industriales o domésticos, etc.), ya que el usuario final podrá recibir una contraprestación si vende los ahorros obtenidos para su posterior certificación mediante el Sistema de CAE.
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