Mesa negociadora del acuerdo de Gobierno en el País Vasco con los nacionalistas Ortuzar, Pradales y el socialista Eneko Andueza
La 'pedrea' del PNV con el Concierto: arranca a Sánchez que más empresas tributen solo en País Vasco
Pactan elevar de 10 a 12 millones el umbral de cifra de negocio que garantiza contribuir únicamente a las Haciendas forales
La renegociación del Concierto económico vasco, celebrada la semana pasada sin aviso previo, ha dejado un saldo más que positivo para las Haciendas forales vascas, en manos del PNV. Además de la participación en el Ecofin y la OCDE, la concesión de más autonomía en 14 impuestos traerá como consecuencia un incremento importante del número de empresas que podrán contribuir únicamente en territorio vasco.
Esto se corresponde en particular con la elevación de 10 a 12 millones de euros al año del umbral del volumen de operaciones. «Esto ampliará el número de contribuyentes que tributan en exclusiva a las Haciendas Forales en el Impuesto sobre Sociedades y en el Impuesto sobre el Valor Añadido», considera el Gobierno vasco, que lo justifica «en un impulso al autogobierno económico-financiero de Euskadi, que redunda en mayor bienestar».
En adelante, las Diputaciones vascas tendrán más capacidad normativa no solo en Sociedades, sino también en el Impuesto sobre el Valor Añadido, el impuesto sobre Depósitos en entidades de crédito, el impuesto sobre el valor de la producción de energía eléctrica e incluso el impuesto sobre la producción de combustible nuclear gastado y residuos nucleares. También en el polémico impuesto al plástico, cuya recaudación ha batido todas las previsiones. Además, la Renta de No Residentes pasa a ser un tributo concertado de normativa autónoma en todos los supuestos
Junto a todo ello, el País Vasco ha pactado un Cupo o compensación al Estado por los servicios que presta en territorio vasco inusualmente bajo, de 1.504,50 millones de euros. La cantidad se pacta año a año y supuestamente se referencia al porcentaje de PIB del País Vasco en relación al conjunto del Estado, un porcentaje que se mantiene fijado en el 6,24 % desde 1981. En 2023 la cantidad a pagar por las Haciendas vascas ascendió a 1.618,50 millones, mientras que en 2022 fue de 1.711,90 millones.
«El cupo es un acuerdo político. Solo hay una cosa que no ha cambiado en 40 años: los parámetros para hacer el ajuste. Si estos parámetros respondieran a cualquier variable economía, habrían cambiado. Pero no lo han hecho ni está previsto que lo hagan. Hay una opacidad absoluta en el sistema foral», según el catedrático de Hacienda pública de la UPV-EHU, Ignacio Zubiri.
Zubiri considera que las Haciendas forales «realizan una competencia fiscal» al resto de comunidades autónomas. «No hay una sola medida de beneficio fiscal que se haya inventado que no se haya aplicado por el País Vasco», denunciaba Zubiri durante el reciente congreso de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado, IHE.
«Pese al caos parlamentario de Madrid, el PNV sigue sacando adelante sus acuerdos», afirmaron la semana pasada los nacionalistas vascos, en medio además de los intentos del PSOE de poner de acuerdo a sus socios para acordar, en la Comisión de Hacienda del Congreso, un amplio paquete de subidas fiscales, como el impuesto global del 15 % a las multinacionales o el tributo a la banca, a condición, en el caso vasco, de que sean las Haciendas forales quienes lo recauden y tengan la opción de poder bonificarlo.
