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El ministro para la Transformación Digital, Óscar LópezEuropa Press

Competencia cuestiona la prisa del Gobierno para licitar el nuevo canal al que optaría la editora de El País

La CNMC afirma que no hay razones técnicas que justifiquen priorizar el concurso de la nueva licencia televisiva a la reordenación del espacio

El Gobierno avanza en la reordenación del espacio radioeléctrico que muy probablemente acabará ensanchando el mapa televisivo en España. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha realizado una valoración positiva del Real Decreto por el que se aprueba el plan técnico nacional de la TDT. El organismo cuestiona, no obstante, que el Ejecutivo haya decidido priorizar el concurso de una nueva licencia lo que, afirman, «podría retrasar en varios meses el desarrollo del plan».

El proyecto, aprobado el pasado 26 de septiembre en Consejo de Ministros mediante tramitación administrativa urgente, tiene como principal objetivo sentar las bases de la tecnología de transmisión DVB-T2 y de una nueva codificación. El objetivo es generalizar las emisiones en Ultra Alta Definición (UHD) de manera más eficiente. Por ahora, solo TVE emite en UHD.

Pero además, el dictamen de Competencia confirma lo que el sector venía dando por hecho: que la reordenación del espacio abrirá un hueco para una nueva licencia de televisión. La CNMC critica que el planteamiento presentado por el Ejecutivo anteponga la concesión de la nueva licencia a la reordenación misma del espacio. Como adelantó El Independiente y confirmó El Debate, a ella podría optar el grupo Prisa, editor de El País y propietario de Cadena Ser.

«Dado que no existe una conexión directa entre la reordenación de canales y múltiples digitales con la adjudicación de la nueva licencia, se propone la supresión de esta limitación, pudiendo la licitación en cualquier caso llevarse a cabo en paralelo a las actuaciones para la reordenación de canales», propone la CNMC.

Según el proyecto del Ejecutivo, una vez adjudicada la nueva licencia de emisión, la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales (Setid) pondrá en marcha la redistribución de capacidad para que Antena 3 y Mediaset tengan acceso al nuevo múltiple digital RGE2, para emisiones simultáneas que sus contenidos HD con resolución en UHD.

Desde el pasado mes de septiembre, es Antonio Hernando quién ostenta dicha Secretaría de Estado, dependiente del ministerio de Óscar López. Ambos nombramientos se oficializaron tras la salida de José Luis Escrivá como ministro de Transformación Digital, con destino al Banco de España.

El organismo que preside Cani Fernández también pide al Ejecutivo poder supervisar la licitación del nuevo canal: «Sería recomendable que la CNMC, dadas sus funciones de supervisión del mercado (...) participara mediante informe previo a la convocatoria, para que pueda pronunciarse sobre el pliego de bases».

Pinchazo y roces en Colombia

En los últimos meses, Prisa ha iniciado una aventura televisiva en Colombia. Desde el 1 de octubre gestiona los contenidos del Canal 1, mediante una licencia de Radio Caracol. La operación no gustó en el Ejecutivo de Gustavo Petro, que insinuó «intereses ocultos», lo que motivó un comunicado por parte del grupo mediático que preside Joseph Oughourlian. Tras su desembarco se ha producido un drástico cambio en su programación, con una importante caída en la audiencia hasta mínimos históricos, coincidiendo con la salida de la parrilla, entre otros, del noticiario histórico CM&.

En España, el grupo carece en la actualidad de concesiones tras abandonar el ya extinto Canal+ y, posteriormente, Cuatro, adquirida por el grupo italiano Mediaset en 2009. La última subasta de licencias de televisión de calado se produjo en octubre de 2015. El Gobierno, entonces liderado por Mariano Rajoy, acordó la adjudicación de seis licencias de TDT en abierto, a Atresmedia Corporación, Mediaset, el Real Madrid, 13 TV, Secuoya y Radio Blanca.

La primera aventura de Prisa en televisión data de 1989, con la creación de la Sociedad Gestora de Canal+, posteriormente renombrada como Sogecable y, en su última etapa, como Prisa TV. En 2005 evolucionó al actual canal de televisión Cuatro, que acabó vendiendo posteriormente a Mediaset, en una operación que le acabó reportando, en 2014, más de 550 millones de euros en ingresos.