
Uvas de la D.O. Ribera del Duero
Castilla y León
La D.O. Ribera del Duero, en armas contra la Junta por las macrogranjas de cerdos
Tambores de batalla en el campo castellanoleonés. Un choque ‘entre hermanos’ asoma en una de las regiones por excelencia de la agricultura y la ganadería española.
La Denominación de Origen Ribera del Duero, una de las más populares del país, exige responsabilidad al gobierno de Alfonso Fernández Mañueco para que despeje de ganadería intensiva su zona de interés.
Los productores del caldo de la franja del río Duero señalan a la administración del Partido Popular (PP) por incumplir unas promesas que sí habría satisfecho Vox.
La Comisión de la D.O ha comunicado que, tras insistir durante años «de consejería en consejería» para que la Junta de Castilla y León libere de las instalaciones de ganadería intensiva su territorio, consiguió el visto bueno del presidente Mañueco. «Se comprometió personalmente a registrar lo antes posible la Proposición no de Ley (PNL) redactada por el PP», indican desde la Comisión de la D.O., donde lamentan el frenazo popular pese a contar con el apoyo de Vox.«La Ribera del Duero agradece a Vox, que cumplió su palabra registrando la PNL redactada por el PP, y pide al presidente Mañueco responsabilidad cumpliendo lo pactado, a fin de no propiciar tensión entre sectores hermanos», advierte la Comisión que representa a 8.000 viticultores, 390 bodegas y a todos los establecimientos de enoturismo del área.
El movimiento de Vox, antiguo socio de gobierno del PP en la Junta, permitirá que la proposición sea votada en el pleno de las Cortes de Castilla y León en febrero. La D.O. aspira a que el PP se sume entonces.
«La regulación que exigen los vitivinícolas no persigue la destrucción del sector del porcino, sino su ordenación para hacer posible la pervivencia de ambos (…) Castilla y León es muy extensa y hay sitio para actividades de muy diversa índole. Pedir el cese de la expansión de este tipo de grandes granjas dentro de las denominaciones de origen no quiere decir estar en contra de la ganadería extensiva. Todo lo contrario», recalca la Comisión de la D.O.
Los productores de vino de la Ribera del Duero condenan que el consejero Suárez-Quiñones haya declarado su interés en la instalación de plantas de biogás. «Quizá sea este el escollo que hace que, una vez más, las demandas de todo el sector del vino, el enoturismo, la hostelería y las plataformas de ayuntamientos afectados, sean postergadas de nuevo dando así una patada adelante al problema», apuntan.
La Comisión de la Ribera clama por una regulación para evitar «el serio e irreversible daño» que supone la implantación de macrogranjas en la Ribera del Duero. «Los viñedos y el río Duero no pueden moverse de sitio. Los nuevos proyectos de ganadería intensiva, sí», señalan.