Fundado en 1910

Ángel EscribanoThorun Piñeiro

La salida de Murtra hacia Telefónica deja Indra en manos de Ángel Escribano

Los Escribano han incrementado su peso en la compañía en los últimos meses hasta alcanzar el 14,3 % del accionariado

Efecto dominó en Indra tras la salida de Marc Murtra hacia Telefónica. Ángel Escribano (Madrid, 1971) será el nuevo presidente de la firma española de tecnología y defensa, consolidando así el creciente peso en la compañía de EM&E, el grupo que gestiona junto a su hermano Javier.

Escribano entró en el consejo de Indra el pasado verano, tras el incremento de su peso accionarial. Es, tras la SEPI, el segundo accionista de la firma, y gestiona un 14,3 % de la cotizada tras hacerse, el pasado diciembre, con un nuevo paquete del 6 % del accionariado.

Indra «lo está haciendo muy bien. Le están dando un buen cambio a la compañía», afirmó el propio Escribano en una reciente entrevista con El Debate, publicada el pasado mes de septiembre. «Si queremos tener una gran empresa en el sector de la Defensa, habrá que crearla. Trabajamos para ser muy grandes, y que Indra también lo sea», añadía.

Ingenio y tesón

Fundada en 1989, lo que entonces era un humilde taller creció gracias al ingenio y al tesón de los dos hermanos. Una muestra de ello, como contaba Jordi Benítez en este diario: el propio Ángel, ciclista aficionado, se fue en bici a principios de los 90 a Construcciones Aeronáuticas —hoy Airbus—, se inventó que tenía una reunión con el director comercial y le convenció para que les encargara reparar piezas del avión de combate Eurofighter y fabricar piezas para el lanzador de satélites Ariane 5.

Hoy, Escribano cuenta con una plantilla de 1.300 empleados y una cartera de pedidos superior a los 1.000 millones de euros. Su facturación cerró 2024 en el entorno de los 300 millones. De ellos, un 60 % proceden del mercado internacional.

Sus principales productos son estaciones de armas remotas, sistemas de guiado de munición, soluciones antidron o robots. Es decir, conoce muy bien el sector de la defensa, en el que el Ejecutivo busca potenciar a Indra para convertirla en un gran campeón europeo.

Durante su conversación con este periódico, Escribano quiso desmentir que su desembarco en Indra tenga que ver con su cercanía al Gobierno. «No somos amigos de Pedro Sánchez porque no le conocemos más que de la televisión. No me importaría conocerle. He conocido a Feijóo, a Rajoy, a Zapatero, a todos los ministros de Defensa desde hace quince años. No somos afines a nadie, ni de izquierda, ni de derecha».

Como él mismo contó a este periódico, considera que Indra «tiene un potencial impresionante, tanto con este Gobierno como con los anteriores como con los venideros, pues todos apoyarán a la empresa referente española en Defensa porque el 28 % del accionariado es del Estado».

Entre sus principales retos, tras su nombramiento, adelantado por Expansión, Escribano deberá rematar el giro hacia el negocio de defensa de Indra, decidir si sigue adelante o no con la filial de medios de pago Minsait, confirmar o descartar la compra de Hispasat y afrontar el interés del ejecutivo de integrar la compañía en Telefónica para, como adelantaba este diario, dotar al grupo de una cobertura tecnológica de la que ahora carece.