Así fue el examen de Matemáticas que dejó una sangría de suspensos entre el alumnado más aplicado de España

Ha sido una de las protagonistas de la última selectividad. Los datos que ha arrojado en cuanto a resultados no dejan lugar a la duda: Matemáticas Aplicadas fueron un auténtico hueso para los alumnos valencianos de la última PAU (Prueba de Acceso a la Universidad).

Las correcciones han resultado demoledoras para los aspirantes: la nota media de la prueba se ha situado en un exiguo 5,24. Y poco más de los 8.260 estudiantes de la Comunidad Valenciana que se presentaron la pudieron aprobar. Es decir, que la asignatura provocó un 41,4 % de suspensos.

El alumnado más aplicado del país

Con todo, el alumnado valenciano ha sido considerado como el más aplicado de toda España, porque según las estadísticas del Ministerio de Educación, el 98,15 % han aprobado la selectividad. Sus 19.905 aprobados –de un total de 20.278 presentados– suponen la tasa más alta de todo el país.

Sin embargo, al estudiantado valenciano se le atragantó el examen de Matemáticas Aplicadas. Frente al 58,6 % de aquellos que lo solventaron, la asignatura de Alemán registró un 100 % de aptos (aunque solo se presentaron 21 alumnos).

Así fue el examen

¿Qué ocurrió, entonces, con esta prueba? Fue un examen, el de la convocatoria de junio, donde los aspirantes debían contestar a tres problemas de entre los seis propuestos, siendo cada uno de ellos valorado entre 0 y 10 puntos y extrayéndose la nota final de la media aritmética de los tres.

El primer problema habla del caso de un dueño de un perro al que el veterinario le ha recomendado una cantidad determinada de hidratos, proteínas y gradas, existiendo en el mercado varias marcas de comida para canes. Teniendo en cuenta que cada una contiene diferentes unidades de producto, el alumno debe saber como combinarlas para obtener la dieta deseada por el mínimo precio.

El problema 2 es de matrices, mientras que el tercero aborda el caso de la función f (x) con el que, con ayuda de una regla, se debe llegar hasta los puntos de corte con los ejes coordenados, las asíntotas horizontales y verticales, los intervalos de crecimiento y decrecimiento y los máximos y mínimos locales.

El cuarto ejercicio habla de la situación de una pequeña empresa que paga una cuota fija mensual de luz. Teniendo en cuenta que aparte de ella, los primeros kWh y los siguientes se pagan en cantidades diferentes, el estudiante debe lograr dilucidar la cuantía de los recibos en función del consumo.

El siguiente tiene como protagonista al famoso ladrón Arsenio Lupin, con el cual los aspirantes deberán utilizar el sistema de probabilidades para concretar cuantas opciones tiene de desconectar la alarma del Banco de París.

Finalmente, el problema final expone la situación de los clientes de una agencia de viajes, unos están casados y otros no, pero gracias a la probabilidad, habrá que saber qué cliente seleccionado hace un determinado número de viajes.