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El País Vasco ha comenzado un proceso de borrado del español de sus aulasMontaje: Paula Andrade

Ley de Educación del País Vasco

El Gobierno vasco reconoce que el español puede desaparecer de las aulas

PNV y PSE logran un acuerdo para el blindaje de los actuales modelos lingüísticos, aunque el A (castellano) queda herido de muerte por su situación de marginalidad

El PNV y el PSE han llegado a un acuerdo para el proyecto de Ley de Educación vasca, que inicia su fase definitiva de su tramitación y que, fruto de dicho contrato, se convertirá en la norma legislativa más importante de la legislatura.

Socialistas y nacionalistas acordaban sobre la bocina una veintena de enmiendas, entre las que destacan aportaciones como que se «dejarán la aplicación de los modelos lingüísticos en manos de cada centro en función de las características sociolingüísticas en los que se ubica cada uno de ellos», en palabras del portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria.

El 70 % del alumnado estudia con el modelo D, donde el vascuence es vehicular, y tan solo el 10 % acoge el A, donde lo es el español

Zupiria ha comparecido tras el acuerdo alcanzado con el PSE para explicar el tratamiento que el nuevo proyecto dará a los modelos lingüísticos actuales: A (castellano), B (bilingüe) y D (vascuence). «Los modelos quedarán, de alguna manera, en manos de cada centro», comentó.

El modelo en castellano, en riesgo

Pero en la práctica, supone un paso más hacia la desaparición del español de las aulas. Es un hecho que desde hace años, el rodillo nacionalista ha dejado el modelo A, donde el castellano es vehicular, en algo cada vez más marginal, ya que algunos centros, ante la falta de demanda, directamente ni lo ofrecen. Ahora, con la nueva ley, serán los centros quienes desarrollan su propio proyecto –al estilo de lo que ocurre en Cataluña–atendiendo a las necesidades sociales de su entorno.

Una manera de reconocer que las pocas familias que deseen para sus hijos una educación en español en determinados centros será algo así como una quimera. En la red educativa de dicha región es mayoritario el modelo D, con un 70 % del alumnado, mientras que el bilingüe aglutina al 20 % y el español solo atrae al 10 % restante.

Así incluso lo ha deslizado el consejero de Educación, Jokin Bildarratz, que ha reconocido que en realidad lo que se propone con esta norma «es una actualización» del sistema de modelos «para adecuarlo a una nueva realidad». Reconociendo que el A es minoritario y por tanto, a nadie debería extrañar que desapareciera o fuera sustituido.

Preguntado por la validez o permanencia de ese modelo en español, el titular de Educación ha declarado que actualmente no puede asegurarse que perviva «tal y como lo conocemos» o si, por el contrario, «será diferente», ya que, ha añadido que los modelos lingüísticos «son solo instrumentos, no objetivos en sí mismos».

No podemos asegurar que el modelo en castellano pueda pervivir tal y como lo conocemosJokin BildarratzConsejero de Educación del Gobierno vasco

Enmiendas de los socialistas

La ‘entrada’ del PSE en el acuerdo puede interpretarse como una negativa por parte de la coalición soberanista Bildu a dicha ley, que en el acuerdo inicial con el PNV en el mes de mayo pretendía avanzar hacia un sistema educativo totalmente 'euskaldunizado'.

Si bien la ley subraya que el euskera o vascuence será el eje central en torno a cual se construyen los proyectos lingüísticos, los socialistas pueden vender que el modelo A en español todavía pervive, aunque solo en la teoría porque en la práctica está cada vez más debilitado, y que ha provocado el enfado de los herederos de la antigua Batasuna.

Los socialistas vascos se han congratulado de que el actual texto «garantizará que las familias vascas puedan elegir el modelo que quieren para sus hijos e hijas, ya que la Ley de Educación va a contribuir a que no se instaure un modelo lingüístico único, de inmersión y monocorde», en declaraciones de Eneko Andueza, su secretario general.

«Nosotros siempre vamos a contribuir al interés general, a garantizar que la gente tenga libertad para elegir el modelo y evitar un modelo exclusivo monolingüe que nos lleve a una inmersión impuesta», ha afirmado.

Eje vertebrador del vasco

El optimismo de los socialistas contrasta con la realidad, porque desde la sede de Ajuria Enea se dice que aun con las enmiendas, el eje vertebrador de la enseñanza corresponde al idioma vasco.

​Bingen Zupiria fue así de claro en su comparecencia que lo que se plantea con la futura ley es «que el euskera sea el eje vertebrador de un sistema educativo en el que, además del euskera, los jóvenes tengan un buen conocimiento de la lengua castellana y de una tercera lengua, que les permita desarrollarse en el mundo que les va a tocar vivir».