Pioneros en la educación anti-'woke' en Europa: desafiando las corrientes actuales
Pese a que la narrativa woke avanza en el contexto educativo, encontramos sólidos ejemplos en Reino Unido, Hungría y España que actuarán en defensa de aquellos que busquen la verdad en libertad
En un contexto educativo donde la narrativa woke ha ganado terreno, han surgido en Europa empresarios e instituciones pioneras que desafían esta corriente y abogan por un enfoque más crítico y equilibrado. Estos líderes educativos, comprometidos con la diversidad de opiniones y el pensamiento independiente, han comprendido la importancia de volver a las raíces y de unirlas a los debates del presente. Son tradicionales en el sentido literal de la palabra traditio (del Latín, tradire, entregar), porque están recuperando y entregando el tesoro de la cultura occidental los jóvenes en sus aulas escolares y universitarias, en la cultura y en el ocio.
El impulso de estos mecenas ha hecho posible la creación de centros educativos que están marcando la pauta para un diálogo más reflexivo, desempeñando un papel crucial en el escenario educativo europeo. Están siendo capaces de desafiar la rigidez ideológica y de promover la diversidad de pensamiento. El enfoque anti-woke que encontramos en la educación impartida en estos centros no busca negar las problemáticas sociales, sino más bien fomentar un debate abierto y respetuoso, garantizando que la educación siga siendo un espacio donde se celebren la libertad del disenso y se impulse la búsqueda de la verdad. En un momento en que la polarización amenaza con dividir, estos empresarios e instituciones sin ánimo de lucro están construyendo puentes hacia un enfoque más sólido y equilibrado en la educación.
En Hungría destaca el Matheus Corvinus Collegium (MCC), con el objetivo de brindar una educación académica a los jóvenes húngaros de más talento
Presentamos algunos modelos que están liderando el cambio en la educación en el momento actual: en Reino Unido destaca la Universidad de Buckingham, fundada por académicos disidentes de la Universidad de Oxford y auspiciada desde su inicio por Margaret Thatcher (como Secretaria de Educación supervisó la creación del colegio universitario en 1973, como Primera Ministra contribuyó decisivamente a convertirlo en universidad en 1983; y cuando se retiró de la política en 1992, Thatcher se convirtió en la segunda rectora de la universidad, cargo que ocupó hasta 1998).
El caso de Hungría
En Hungría destaca el Matheus Corvinus Collegium (MCC), con el objetivo de brindar una educación académica a los jóvenes húngaros de más talento en su desarrollo profesional. Actualmente, MCC ha ampliado su amplia gama de cursos, actividades y programas educativos a más de 7.000 estudiantes en toda la cuenca de los Cárpatos. MCC es una alternativa excepcional a otras universidades occidentales donde los estudiantes húngaros adquieren conocimientos impartidos por los mejores profesionales y profesores de Europa y Estados Unidos.
Detrás de esta iniciativa se encuentra András Tombor, empresario, inversor y filántropo húngaro, educado en los benedictinos de Pannonhalma e historiador por la Universidad Eötvös Loránd, de dilatada experiencia profesional tanto en el sector público (funcionario de la administración húngara hasta el 2000, UNESCO, BERD), en el privado (PWC, Citibank), así como en finanzas (VEOLIA, ferrocarriles húngaros, etc). El Mattheus Corvinus Collegium tiene sede en Budapest y recientemente, en Bruselas.
El legado del CEU
En España, la Asociación Católica de Propagandistas en fidelidad a su carisma de promover y defender el humanismo cristiano en la vida pública, es la responsable de numerosas iniciativas relacionadas con la comunicación, la cultura y la educación en España y desde España. En el ámbito universitario, la Asociación impulsa el grupo educativo CEU que ya cuenta con cuatro Universidades (San Pablo CEU en Madrid; Cardenal Herrera en Valencia; Abat Oliba en Barcelona; y Fernando III, en Sevilla); además de haber promovido diez colegios y un centro de formación profesional. El denominador común de las obras educativas CEU consiste en ofrecer esa educación tradicional de la mano de la innovación docente y de la ayuda incondicional al mérito, siempre bajo el lema «Veritas in libertate».
El enfoque anti-«woke» que encontramos en la educación impartida en estos centros no busca negar las problemáticas sociales, sino más bien fomentar un debate abierto
Finalmente, Francia presenta dos mecenas católicos muy distintos y ambos dignos de recuerdo, Vincent Bolloré y Phillipe de Villiers. Bolloré, empresario francés, ha sido comparado con el australiano Rupert Murdoch, pues ha creado un imperio mediático alternativo al «mainstream media» sin llegar a intervenir en la política, pero dando un espacio considerable a puntos de vista ajenos a la agenda global. En el terreno educativo ha contribuido comprando editoriales de libros escolares e infantiles, catalizando narrativas ajenas al sesgo woke y fieles a la historia y cultura francesas. En cambio, Villiers, oriundo de Vendeé, sí ha intervenido en la política francesa, y cuenta además con una dilatada experiencia profesional como alto funcionario, empresario y escritor. Su mayor contribución al cambio educativo la ha realizado a través de sus libros, que hoy pueden calificarse de visionarios, así como a través de los parques temáticos Puy du Fou en Francia y en España, donde le han valido el merecido título de «Hijo adoptivo de Castilla».
Si tuviéramos que definir las características comunes a estos grandes mecenas anti-woke de la educación y de la cultura en su sentido más originario y verdadero, habría que buscar no sólo sus cualidades profesionales sino tomar como punto de partida su amplia cultura (nadie da lo que no tiene) y sus cualidades intelectuales: el aprecio por la libertad académica y el pensamiento crítico como un principio dela vida intelectual; el rechazo de prevalencia de la ideologización sobre los datos o los hechos; la ausencia de miedo a tener o escuchar opiniones diferentes; su resistencia a la cancelación cultural, y la preocupación por la polarización socio-política actual.
En definitiva, estos nuevos mecenas del siglo XXI aparecen como business angels comprometidos con todos quienes busquen la verdad en libertad.
- Patricia Santos es titular de Filosofía Política y del Derecho