Un instituto de Tarrasa encarga a sus alumnos hacer un informe sobre la supuesta marginación del catalán
El profesor de catalán pidió a sus estudiantes que realizaran un trabajo en el que las únicas fuentes a utilizar eran aquellas extraídas de documentos de 'Plataforma per la Llengua' o la propia Generalitat
Un profesor de 3º de la ESO del colegio Vedruna Vall de Tarrasa ha aprovechado la asignatura de catalán para encargar una especie de informe ad hoc en el que los alumnos, usando las sesgadas fuentes de información propuestas por el docente, debían sostener la teoría de una supuesta situación de amenaza para dicha lengua.
Tal y como ha podido comprobar El Debate, el docente propuso como fuentes de información varios dossieres elaborados por la Plataforma per la Llengua, considerada la ONG del catalán, así como otros documentos elaborados por el Gobierno autonómico o una web de voluntariado lingüístico. Todo en la misma dirección: demostrar que el catalán vive una especie de situación de amenaza en España, y de ahí la extrema necesidad para que sea reconocido oficialmente en Europa.
La 'injusticia' de Francia
Estos ‘deberes’ se enmarcan en un contexto de ofensiva por parte de las instituciones en manos del nacionalismo para lograr la oficialidad del catalán como lengua de trabajo en la Unión Europea.
Además, en esas fuentes de información facilitadas por la escuela a los estudiantes, se critica la situación en Francia, haciendo ver a los alumnos la ‘injusticia’ que supone que el catalán no logre equipararse al francés en lo que ellos han venido a llamar la ‘Cataluña Norte’, pese a que en la práctica solo es suelo galo.
«El francés es la única lengua oficial de Francia», se lee.
Inmersión lingüística
Tal es así que hasta los reveses de la Justicia, que únicamente salvaguardan los derechos de las familias castellanohablantes exigiendo el 25 % en español, la Generalitat hace oídos sordos.
Es por ello que una delegación de eurodiputados visitarán Cataluña los próximos 18, 19 y 20 de diciembre para comprobar los efectos de la inmersión, que a todas luces es de imposición. Y aprovecharán la visita para entrevistarse con aquellos padres señalados por haber pedido más educación en castellano o con entidades que defienden el bilingüismo.
El viaje se completa con la visita a dos escuelas de El Prat para comprobar en persona como se aplica el modelo «de la escuela catalana» de la que presume la Generalitat, donde el catalán es la lengua vehicular de la educación y donde los decretos del Gobierno autonómico bloquean las sentencias de la Justicia en torno al 25 % del castellano.