Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes
Informe PISA: la izquierda lleva a España a su peor resultado educativo
Nuestro país sigue cotizando a la baja en desempeño educativo: nuestros estudiantes obtienen en 2022 una puntuación 473 en matemáticas y 474 en lecturas, mientras que en 2018 alcanzaron un promedio de 481 y 477
La octava edición del informe PISA, hecho público este martes con la evaluación y comparación de los conocimientos de los alumnos de 15 años en matemáticas, comprensión lectora y ciencias, dicta que los países asiáticos siguen disparados pese a que, en promedio, la evaluación ha registrado «una caída sin precedentes» en el rendimiento de toda la OCDE. España sigue cotizando a la baja. Sus alumnos de 15 y 16 años logran los peores resultados de la historia en matemáticas y emborronan sus resultados en lectura.
Es cierto que en este contexto en declive, algo o mucho ha tenido que ver la pandemia de la covid y el cierre de los colegios. En comparación con 2018, el desempeño de los alumnos ha caído diez puntos en la puntuación de lectura y casi 15 en matemáticas. Uno de cada cuatro alumnos de 15 años se considera de «bajo rendimiento» en estas tres áreas en los países de la OCDE. La Organización y Cooperación para el Desarrollo Económico concluye que dicho retroceso solo debe atribuirse «parcialmente» al coronavirus, ya que las puntaciones en matemáticas ya eran pobres antes de la llegada del coronavirus.
En general, países como Australia, Japón, Corea, Singpur y Suiza, que mantuvieron o elevaron aún más los ya altos niveles que presentaban sus estudiantes, con puntuaciones que oscilaron entre los 487 y los 575 puntos (estando la media de la OCDE en 472) mostraron características comunes, como cierres de las escuelas más breves, menos obstáculos al aprendizaje a distancia y un apoyo continuado de profesores y padres.
El texto también menciona positivamente a aquellos países fuera de los puestos de privilegio pero que «han hecho progresos significativos» hacia la educación secundaria universal, clave para permitir la igualdad de oportunidades y la plena participación en la economía. Entre ellos, están Camboya, Colombia, Costa Rica, Indonesia, Marruecos, Paraguay y Rumanía, que han extendido rápidamente la educación a poblaciones anteriormente marginadas en la última década.
El caso de España
En el caso de España, se ha descartado la comparación de este PISA con las cifras obtenidas en 2018, ya que se ha considerado que las anomalías detectadas en la realización de los test entonces invalidaban ese ejercicio. La referencia precedente pasa a ser la de la sexta edición, que se llevó a cabo en 2015. Pero ni con esas las noticias son positivas.
En concreto, el estudio revela que en matemáticas los estudiantes españoles han obtenido 473 puntos, lo que supone su peor resultado en la historia del informe (ya que desde 2003 siempre han obtenido al menos 480 puntos) y ocho puntos menos que en 2018, cuando obtuvieron 481 puntos.
En lectura, también mal: los alumnos españoles han obtenido 474 puntos, lo que supone tres puntos menos que en 2018 (477), aunque 13 puntos más que su peor resultado histórico en PISA, ya que en el año 2006 obtuvieron 461 puntos.
Aunque los responsables educativos de nuestro país se pueden agarrar a que de media, nuestro país no cae y se mantiene a la altura de la media de la propia OCDE, no es menos cierto que durante el periodo más reciente (2015 a 2022), la brecha entre los alumnos con mejores resultados (el 10 % con las puntuaciones más altas) y los alumnos con peores resultados (el 10 % con las puntuaciones más bajas) no cambió significativamente en matemáticas y ciencias, pero aumentó en lectura.
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En matemáticas, el rendimiento descendió en una medida similar tanto para los alumnos de alto rendimiento como para los de bajo rendimiento. Y en comparación con 2012, la proporción de estudiantes con puntuaciones por debajo de un nivel básico de competencia (nivel 2) aumentó en tres puntos porcentuales en matemáticas; en seis puntos porcentuales en lectura; y en cinco puntos porcentuales en ciencias.
Castilla y León, a la cabeza del país
Entre las comunidades, nos encontramos una cierta constancia entre aquellas que se solían encontrar en cabeza y las que ocupaban los puestos de cola en los anteriores trabajos.
Castilla y León es la número 1 del ranking autonómico con puntuaciones por encima de la media de la OCDE: 499 puntos en matemáticas, 498 en lectura y 506 en ciencias. En las posiciones de la retaguardia aparecen Canarias en matemáticas, con 447 puntos; Andalucía, en lectura con 461 puntos y ambas dos en ciencias, con 473. Canarias, Extremadura y Andalucía ocuparon esas posiciones en las materias respectivas en 2015.
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España ha empeorado sus puntuaciones en esta edición en todas las áreas, pero han caído más en aquellas comunidades que ocupan las posiciones de arriba que las de abajo. Sin embargo, la brecha territorial parece consolidarse, lo que acentúa las desigualdades territoriales. Hasta 52 puntos en matemáticas, 37 en lectura y 33 en ciencias separan los resultados máximos y mínimos reflejados en nuestras regiones. De acuerdo con PISA 2022, son 20 puntos los que representan el ritmo anual de aprendizaje.
Distraerse en clase
Es otra de las derivadas que nos deja el último informe PISA. Así, en 2022, alrededor del 22 % de los alumnos en España declararon que no podían trabajar bien en la mayoría o en todas las clases de esta materia (estando la media en la OCDE en el 23 %); el 38 % de los alumnos no escuchan lo que dice el profesor (30 % en la media de la OCDE); el 33 % de ellos se distraen utilizando dispositivos digitales (30 % en la media de la OCDE); y finalmente, el 26 % declara haberse distraído con otros alumnos que los utilizaban (25 % en la OCDE).