Educación
Un padre denuncia el tipo de lecturas que mandan a su hijo en la ESO: «El Lazarillo de Tormes se lo daré yo»
Un progenitor lamenta que en el instituto ha decidido sustituir a los grandes clásicos de la literatura por otro tipo de lecturas modernas
La relajación de los contenidos y en paralelo, la caída en la exigencia es uno de los temas más habituales a la hora de analizar los problemas de la educación española actual.
Al hilo de lo anterior, ha cobrado relevancia la denuncia de un padre en las redes sociales que reflejaría esta incómoda situación.
Y es que la lectura es una de las bases de todo aprendizaje, y lo que en esta acusación se dice es desolador.
«Esta situación es consecuencia del terrible mal que han provocado las nuevas pedagogías, pero luego viene la realidad con los escandalosos porcentajes de abandono escolar» decía a este respecto el profesor Xavier Massó en una reciente entrevista con este medio.
«En primaria hay un momento crítico en el que se pasa de haber aprendido a leer a aprender leyendo. Cerca del 40 % de los alumnos no lo acaba de consolidar, arrastrando esa mochila de carencias en 1º de la ESO cuando los profesores nos encontramos con que muchos de ellos, ya con 12 años, a duras penas saben leer o les cuesta redactar una frase con una subordinada», declaraba a El Debate este docente.
La denuncia de un padre
Ahora, dicho progenitor se ha quejado de lo siguiente: «A mi hijo, en 2º de la ESO, le han enviado como lectura obligatoria El diario violeta de Carlota. Por supuesto, el trabajo se lo haré yo. A cambio, le daré a mi hijo El Lazarillo de Tormes y El buscón de Quevedo. Del resto, sin comentarios. ¿Para qué».
Es decir, que en esa clase de secundaria han decidido optar por, en vez de dos clásicos más eternos de nuestra Literatura, una obra actual catalogada de «feminista» que destila ideología ‘woke’ por sus solapas.
La mencionada obra está escrita por Gemma Lineas y editada por Destino. En su sinopsis, se lee lo siguiente: «¿Por qué el azul tiene que ser el color de los chicos y el rosa, el de las chicas? El diario violeta de Carlota es una guía subversiva que nos invita a reflexionar sobre la situación de la mujer en el mundo actual y nos anima a continuar la cadena violeta. Para descubrir situaciones injustas con la mujer y para detectar cuándo actuamos según unos modelos impuestos, necesitas las gafas de color violeta».
Este padre adjuntaba otro mensaje en X (antes Twitter), donde establecía un paralelismo en cómo habían cambiado las cosas –y su clara degradación–. Y es que, en este caso, se cumpliría el dicho de que cualquier tiempo pasado fue mejor.
«El Lazarillo ya lo tengo preparado para mi hijo. Ya es casualidad que el libro que tenemos en casa es que yo me leí en la EGB con la misma edad que la de mi hijo, trece años. Mi mujer y yo hemos revisado nuestras lecturas del colegio y es para gritar», añadía.