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Cientos de fieles se dan cita para orar en la mezquita Alforkan de BilbaoEFE

La medida «discriminatoria» de un director de colegio con los alumnos que practican el Ramadán

Acusan al centro, situado en Milán, de estigmatizar a los niños musulmanes «enviándoles el mensaje de que son diferentes respecto al resto de sus compañeros»

La polémica está servida en un colegio de Milán, Italia. Una vez ha dado comienzo el Ramadán, mes de ayuno, oración, reflexión y comunidad para los musulmanes, empiezan a surgir los problemas en algunos centros educativos.

Los menores de edad, junto con las mujeres embarazadas o en período de lactancia y los enfermos crónicos, están en realidad exentos de realizar este ayuno, pero son frecuentes los padres de religión islámica que también invitan a sus hijos a compartir la «experiencia».

Por ello, muchos padres solicitan a los colegios en los que asisten sus hijos a que estos se puedan saltar la comida y evitar así ver cómo sus compañeros comen mientras ellos se abstienen. Cada centro solventa esta petición de una forma, y un colegio de Milán ha rechazado ofrecer una alternativa para esos alumnos.

El director del centro en cuestión, tal y como informa la revista Gambero Rosso, ha enviado una circular a los padres en la que les expone las soluciones ante esta situación: obligar a los niños a permanecer en el comedor con el plato delante, libres de llevarse nada a la boca y viendo a sus compañeros comer o, por el contrario, que los progenitores acudan a buscar a los menores y estos estén en casa mientras dure el horario de la comida, desde las 12:30 hasta las 14:30.

Esta postura generó cierta polémica e inmediatamente llamó la atención de la revista gastronómica que escribió: «Decisiones como las de la escuela milanesa no ayudan mucho al diálogo». Asimismo, muchos tildan la solución como discriminatoria, además de que «estigmatiza a los niños musulmanes, enviándoles el mensaje de que son diferentes respecto al resto de sus compañeros».

Suprimir la carne de cerdo

A escasos 40 kilómetros de Milán, en la localidad de Lodi, otra controversia ha surgido, pero justo por el caso contrario. Allí el ayuntamiento de la ciudad ha decidido eliminar la carne de cerdo de los comedores escolares.

El partido italiano Liga ha acusado al alcalde, Andrea Furegato, de haber sustituido las salchichas por otras fuentes proteicas «para adaptarse a la religión islámica». «Al final, son los niños italianos, a quienes les gustaría comer carne como siempre, los que están discriminados. Una elección loca», subraya Angelo Ciocca, eurodiputado de Liga Norte.

A pesar de las quejas, el alcalde no rectifica y dice estar convencido de la decisión tomada. El político no piensa entrar en las polémicas de la oposición y reitera que ha seguido las indicaciones para garantizar una alimentación sana y equilibrada a los estudiantes.

Carne halal en Ripoll

En España también ha habido controversias de este estilo. La alcaldesa de Ripoll (Gerona) exigió retirar menús halal –que obliga a servir una carne que sea permitida por el Islam– en las escuelas públicas. «¡Fuera menús halal de las escuelas!», escribió la regidora en X, en referencia aquel tipo de carne que se sirva según los preceptos del Corán.