Las claves de la polémica con el rector de la Universidad de Salamanca: de «autocitas» a «fraude»
Le acusan de inflar su currículum científico, pero él niega la mayor y ofrece explicaciones de ciertas listas de citas que aparecen en internet a trabajos suyos
Las noticias en torno al recién nombrado rector de la Universidad de Salamanca, Juan Manuel Corchado, no han hecho más que sucederse en las últimas semanas. ¿Quién es? y ¿por qué se habla de él? Se trata de un salmantino de 52 años, doctor e investigador y catedrático en el Área de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial. Se le acusa, fruto de investigaciones periodísticas que circulan desde 2022, de inflar su reputación científica e influencia con miles de autocitas y citas falsas motivadas por él mismo a terceros para que le citaran en bases de datos académicas y le hicieran quedar a nivel mundial como mejor científico de lo que supuestamente es.
Por tanto, su integridad y su gestión en el centro tecnológico de la universidad salmantina están en tela de juicio y más todavía desde que el pasado mes de mayo el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades pidiera al Comité Español de Ética de la Investigación un informe sobre la actividad investigadora desarrollada por Corchado y que tras esto, apenas hace unos días, la Agencia Estatal de Investigación le haya cesado «de forma cautelar» en cualquier actuación relacionada con los procesos de evaluación de la Agencia.
La Agencia Estatal tomó esta decisión tras considerar el Comité de Ética que «algunos de los hechos públicos podrían conculcar las buenas prácticas científicas» .
Corchado: «No tiene ningún sentido»
Antes de ser nombrado nuevo rector de la Universidad de Salamanca el pasado 31 de mayo, Corchado publicó un artículo titulado Defendiendo la verdad en su página web defendiendo su integridad como investigador y científico. En él niega que haya inflado su currículum académico a propósito con autocitas. «No se trata, como se ha afirmado, de una «granja de citas» ni nada por el estilo (ofende leer esto). Esas supuestas autocitas eran documentos de trabajo utilizados durante unas sesiones impartidas a alumnos de doctorado sobre cómo escribir artículos científicos (...). Eran, por tanto, ejercicios de clase colgados en una web de la universidad», argumenta.
El rector continúa explicando que algunos de esos artículos terminaron siendo indexados por Google Scholar. «Una mala praxis, sin duda», reconoce. Sin embargo, asegura: «Cuando nos dimos cuenta, eliminamos los que pudimos y tomamos medidas al respecto, pero está lejos de ser un fraude para hinchar el currículum de nadie. Algo que, por otra parte, y a riesgo de sonar inmodesto, pero sí justo con la verdad, no tendría ningún sentido en mi caso». Corchado acaba explicando que, pese a todo, Google Scholar no es el índice que se utiliza para elaborar los rankings científicos y pone como ejemplo uno que sí, Scopus, al que anima a visitar.
Para Corchado toda la polémica responde a un interés político puesto que se aproximaban las elecciones a rector. «Querer hacer un caso de esto solo puede estar animado por una intencionalidad política cuando se aproximan estas elecciones», reflexiona.