Angela Merkel se despide
Goodbye, Mrs. Merkel, España la valoró mejor que a sus presidentes
La todavía canciller estará esta semana en España en su gira final como política
Si hay un país en el mundo donde Angela Merkel es querida, este es España. Según una encuesta de Sigma Dos de julio de 2021, la demócrata cristiana aprobaría con un 7,4, siendo la líder europea mejor valorada y muy por delante del suspenso de Sánchez. La todavía canciller alemana viaja a territorio español, donde Su Majestad el Rey le entregará el Premio Carlos V de la Fundación Yuste por su labor dentro y en nombre de la Unión Europea. La política que tuvo escasa relación con Zapatero, buena sintonía con Rajoy y entendimiento, gracias al inglés, con Sánchez, se despide del país por todo lo alto en pleno cierre de su carrera política.
El premio que la también físico recogerá en el Monasterio de Yuste (Cáceres) le será entregado por su «defensa del proceso de integración europea y del papel estratégico de Europa en el concierto internacional». Merkel se convierte así en la tercera mujer en recibir el Premio Europeo Carlos V tras la que fuera presidenta del Parlamento Europeo, Simone Veil (en 2008) y la segunda como canciller de la República Federal de Alemania, tras Helmut Kohl (2006). El rey Felipe VI recibirá a la canciller como Presidente de Honor, estando también presentes el jefe del Ejecutivo y el de Extremadura, Guillermo Fernández Vara. El acto tendrá lugar en la iglesia del Real Monasterio a medio día este jueves.
16 años como canciller
El galardón llega en el mejor momento. Merkel concluye una gobernanza de 16 años en Alemania que concluirá con la elección de su sucesor. Un relevo que no parece estar resultando fácil en la Unión Demócrata Cristiana (CDU). Los candidatos han escuchado por tercera vez las urnas de unos votantes que les solicitan un cambio de fundamento. Avatares de la política de este socio comunitario que suenan a chascarrillos al lado de la sucesión constante de gobiernos en España. Tanto es así que la líder alemana ha tratado con hasta tres líderes del Ejecutivo español.
¿Quién sucederá a Merkel?
De perfil liberal en lo económico y a la derecha de las derechas, Merz ha sido siempre el más crítico con las políticas de Merkel y con las del ministro de Finanzas, Olaf Scholz. El autodeclarado «europeísta conservador» lidera las encuestas de los empresarios como político en el que más confían para representar sus intereses. Sin embargo, no se encuentra a favor de crear una Europa de deuda por lo que siempre ha sido crítico con el «Fondo de recuperación» europeo.
El jurista y católico militante en la CDU desde antes de terminar el colegio perdió en 2018 cuando quiso presidir la CDU. El marido y padre define el gasoducto Nord Stream 2 –que pretende duplicar las exportaciones de gas de Moscú a Alemania, sin tener que pasar por Ucrania– como «arma política en manos Putin» y aboga por la «renovación estratégica de la CDU».
Homosexual y católico. El político también casado de 41 años encarna el cambio generacional del partido y carga con una amplia experiencia de gestión a sus espaldas. Crítico con Merkel en el «fracaso estatal» de la crisis de refugiados, ha sido sin embargo de los pocos ministros de Sanidad que superara la pandemia sin quemarse en el puesto.
Zapatero, Rajoy o Sánchez
Cuando el 22 de noviembre de 2005 Merkel fue elegida por primera vez canciller, José Luis Rodríguez Zapatero era el presidente del Gobierno en España. En 2008 el socialista revalidó y se mantuvo como presidente hasta 2011. No destacó un gran entendimiento entre ambos líderes, quizás por estar más centrado el socialista en los lazos latinoamericanos de la «Alianza de Civilizaciones» que en los europeos o por la inmersión de España en la crisis financiera que le hizo granjearse una silla en la Europa de segunda velocidad. Ella apreció el recorte económico del socialista y él el freno de la canciller al populismo. Una buena relación con el presidente español cuyos índices de popularidad se dispararon en direcciones opuestas. El último CIS (2011) suspendió a Zapatero con un 3,3; nota muy alejada del notable de la canciller que aun detenta en España.
Con Mariano Rajoy la canciller compartió mucho más que seis kilómetros del Camino de Santiago. Reelegida la política por primera vez en otoño de 2009, Rajoy heredó La Moncloa en noviembre de 2011 e hizo los deberes con una España en crisis. Merkel vio la gestión del popular con buenos ojos y apoyó al entonces presidente del Gobierno, quien confesó en referencia a la alemana: «Fue la única que me dijo que pedir el rescate era un disparate». Frente a la buena valoración de Merkel, Rajoy sin embargo no aprobó las encuestas del CIS.
Angela Merkel fue la única que me dijo que pedir el rescate era un disparate»
Pedro Sánchez tuvo la de tener un primer encuentro informal con sus respectivos cónyuges en agosto de 2018 en Doñana. El socialista supo labrar una relación cordial con la canciller gracias a superar el cliché de todos nuestros mandatarios: hablar correctamente inglés. Sánchez solo llevaba un año tras ganar la moción de censura a Rajoy y ella hacía un año que había sido reelegida por cuarta y última vez canciller. La canciller había adoptado algunas políticas de agrado para el socialista (como la llegada de casi un millón de refugiados en 2015). Sin embargo, el auge de los partidos más conservadores en el parlamento alemán o la presencia de Trump en los EE.UU., o el pacto de los socialistas con Unidas Podemos, provocó un distanciamiento entre los líderes.
El peso que la canciller tiene en Europa ha sido siempre puesto en valor por el socialista. Ella se recuperó de la peor de las crisis de su partido tras su cuarta reelección. Él, ahondó en el espectro más izquierdista y nacionalista para mantenerse en el Ejecutivo. Ahora Sánchez se enfrenta a un suspenso en valoración por los españoles y a un futuro incierto en las próximas elecciones generales del país.
Un hasta siempre de España
El adiós de Merkel no suena a despedida. El pasado domingo se despidió de Israel y hoy martes y mañana miércoles de España. Tampoco pone punto final a su compromiso con la comunidad internacional. La canciller reafirmó este martes en la cumbre extraordinaria del G20 que Alemania está a favor de conceder 600 millones de euros a los «40 millones de afganos» que se encuentran en el «caos», sin «suministro eléctrico ni sistema financiero». La ciudadana de a pie que vive en un apartamento en el centro de Berlín seguro volverá a España por vacaciones, como cualquier retirado alemán que bien aprecia este país del sur de Europa.
Good bye, Chancellor y bienvenida doña Angela Merkel.