Entrevista a Isabel Díaz Ayuso
Ayuso: «Los presupuestos de Sánchez desprecian a Madrid porque aquí no consigue réditos electorales»
Isabel Díaz Ayuso concede una entrevista a El Debate en la que pasa revista a los principales asuntos de actualidad política de España, Madrid y el Partido Popular
Cataluña contará con el doble de presupuesto que Madrid en las cuentas anuales elaboradas por Pedro Sánchez. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cree que esta decisión responde a la incapacidad del presidente del Gobierno de conseguir votos en la región que ella gobierna.
–El Gobierno de la Comunidad de Madrid afronta ahora la aprobación de los presupuestos de la región. Usted se confiesa partidaria de continuar bajando los impuestos. ¿Nos puede adelantar alguna de las bajadas que pretende implementar?
–Vamos a presentar el presupuesto para su posterior debate y en dos semanas daremos más datos de cara a las próximas bajadas. Queremos que ayuden a las clases medias, a las familias, a los empresarios y a todos aquellos que cotizan y pagan para que tengamos una recaudación que nos ayude a salir adelante. Queremos hacer una rebaja de medio punto en todos los tramos del IRPF, añadir nuevas deducciones y reducir la burocracia.
–Ha nombrado usted a las clases medias, que son muy a menudo las más perjudicadas. ¿Cómo se les puede ayudar?
–Lo más importante es el empleo. Si un ciudadano no tiene su propio modo de vida, nada en su entorno gira. Estamos haciendo políticas para atraer empresas, defendiendo la colaboración público-privada y ofreciendo seguridad jurídica, política e institucional a aquellas personas que tienen un proyecto que traer a Madrid. Defendemos a las empresas y a las personas que generan empleos. Además, estamos dando a conocer cada vez más nuestra comunidad. Lo más importante es el empleo y una sanidad y educación pública de primera. Sin embargo, esto no debe entrar en disputa con el sistema privado.
«Algo que me dice que Madrid se verá perjudicada con el reparto de los Fondos Europeos»
–Las negociaciones con Vox no siempre han sido fáciles. De cara a los presupuestos y mantener la relación entre ambos partidos, ¿hasta dónde están dispuestos a ceder en asuntos como la derogación de leyes de género?
–En esta legislatura necesitamos que no voten en contra de nuestras decisiones. Necesito que no bloqueen decisiones que se toman desde el Gobierno constantemente. Aunque no necesitara sus escaños, soy consciente de que tienen muchos votantes que han depositado en ellos sus esperanzas. Hay en muchas cuestiones que encontramos preocupaciones y soluciones parecidas. Yo siempre les he tendido la mano porque es lo suyo. No soy de líneas rojas y ellos en esto sí son más difíciles. Sin embargo, lo que no quiero poner en tela de juicio es que tenemos que gobernar para todos. Por ejemplo, yo no quiero perjudicar la sostenibilidad del sistema educativo a través de propuestas como la de la gratuidad para todos los tramos. No voy a perjudicar a la educación madrileña por una cuestión de permanencia en el poder. Eso ya lo hace Sánchez. Eso sí, hay parte de las leyes de género que pueden y deben mejorarse.
–Sus predecesores dejaron huella con proyectos muy importantes para Madrid: la ampliación de la red de Metro, los grandes túneles que cambiaron el tráfico, la ampliación y consolidación de Ifema… ¿Tiene usted algún proyecto concreto que quiera desarrollar en su legislatura?
–IFEMA y hemos dejado uno permanente como el Zendal, que es el mejor del mundo. Estamos haciendo una reforma integral de otros hospitales como el Doce de Octubre o el Gregorio Marañón. También estamos extendiendo líneas de metro con nuevas paradas. La obra pública y el mantenimiento de lo anterior es algo visible. Nuestra obra más importante es haber cogido Madrid en su momento más difícil, cuando era una de las regiones más castigadas del mundo por la Covid, y haberla situado como un lugar que ilusiona y al que la gente quiere venir.
–Sobre el Zendal hay personas que, más allá de la utilidad en la pandemia, no saben qué se está haciendo allí en este momento. ¿Puede explicar en qué consiste ahora la función del hospital de pandemias?
–El Zendal es un hospital al servicio de todos los hospitales. Además, es un hospital que puede adaptarse a cualquier necesidad como puede ser un atentado, una catástrofe, o una nueva epidemia. En caso de necesitarse ahí está.
Ahora lo estamos usando para la vacunación y lo vamos a necesitar para ayudar a otros hospitales para agilizar sus obras como, por ejemplo, La Paz. Este hospital tiene que reconstruirse desde los cimientos y si no existiese el Zendal se tardaría 8 ó 10 años.
–Los PGE parece que no benefician a Madrid. ¿Es la manera de Sánchez de castigar que la Comunidad de Madrid esté gobernada por el PP?
–Es una manera de desdeñar la capital porque ve que aquí no consigue sus réditos electorales. Es una forma de intentar contentar a los que no van a contentarse como los nacionalistas catalanes o los vascos. Es su forma de demostrar que no le interesa una región que ideológicamente no comprende. No lo hace solo a través del hachazo que nos mete en los presupuestos sino permitiendo que se hable de la Comunidad de Madrid como si fuese un paraíso fiscal y cuando permite debates identitarios como la pretensión de descapitalizar España.
«Hoy el entorno político de ETA decide los presupuestos de todos los españoles»
–La izquierda usa como argumento recurrente, precisamente, que Madrid se ha convertido en un paraíso fiscal pero hay mucha gente que prefiere invertir en Madrid por las ayudas a los empresarios y ciudadanos. ¿Qué ha hecho Madrid y no ha hecho Cataluña para que este pensamiento se haya extendido incluso a nivel internacional?
–Cataluña durante muchos años fue la capital económica en España y, como en otros países, había dos capitales. Pero las élites burguesas y el discurso nacionalista no lo supieron ver o no les interesó verlo. Han hundido a Cataluña en un debate identitario excluyente y racista. Han conseguido expulsar a la empresa y dividir a las familias. Madrid fue elegida capital porque es la región de todos los españoles y de todos los ciudadanos del mundo que quieren progresar. Ahora esto es imbatible. Frente a una Cataluña encerrada, nosotros no dejamos de crecer.
–Respecto a los fondos europeos. ¿Se está haciendo desde ya un uso partidista de los mismos?
–Sí porque no hay información al respecto y los únicos que tienen datos son los propios señores del Gobierno para hacer anuncios sin saber si se van a poder ejecutar sus planes. Desde luego que sí. Algo me dice que Madrid se verá perjudicada.
–¿Cómo ha llegado un país como España a legitimar a un partido como Bildu e, incluso, darle la llave de la aprobación de las cuentas?
–El Gobierno necesita al brazo político de ETA para mantenerse ahí. Están sentados en la mesa como si fuesen uno más. Hoy el entorno político de ETA decide los presupuestos de todos los españoles y forma parte de esa fiesta a cambio de los presos. Imaginaos la imagen que estamos dando al mundo.
–A contrario de la imagen que ofrece usted como presidenta a nivel internacional parece que España cada vez es más irrelevante ¿Qué consejo le daría a Sánchez para evitar esto?
–Consejos no puedo darle a nadie. No soy partidaria de darlos y menos a quien no me los ha pedido. Pero estando en Estados Unidos vi clara la imagen que estamos proyectando de cara al inversor. El hecho de no condenar las dictaduras abiertamente causa un daño enorme a España porque los inversores piensan que si caemos en una dictadura nos va a parecer normal. No generamos ninguna confianza. Es uno de nuestros principales lastres junto a nuestro sistema fiscal, la rigidez de nuestro mercado laboral y el exceso de burocracia. Ver cómo tus socios de Gobierno se han nutrido de dictaduras caribeñas y coquetean con otras, hace un daño tremendo a nuestra imagen.
–El nombramiento del señor Gabilondo como Defensor del Pueblo, ¿qué le parece?
–Tuvimos una buena relación durante la pasada legislatura y luego durante la campaña nos dividimos completamente por sus acusaciones contra el Partido Popular y la Comunidad de Madrid. El uso que hizo de las cifras de la pandemia me pareció reprochable. En el debate de Telemadrid le dije que no iba a contar con mi apoyo para ser Defensor del Pueblo. Después pasaron las elecciones y él tuvo un mal momento de salud. Yo creo que si él acierta ahora en su gestión, eso va a ser beneficioso para todos. Deseo que lo haga bien.
«El Gobierno perjudica continuamente la imagen de España al no condenar a dictaduras como la venezolana»
–¿Recuerda algún momento especialmente duro durante la pandemia?
–Es un sentimiento continuo de frustración. Cuando el virus asoma la cara en Madrid nadie actúa. Empezamos a cerrar los colegios y nos dimos cuenta de que venía algo muy grande. Ver como fallecían personas por centenares diariamente y no tener sitio para los fallecidos fue muy duro.
Me quedaré siempre con haber estado al frente de Madrid en el momento más difícil. Eso me marcará para toda la vida.
–¿Qué le parece la aparición de El Debate?
–Es una oportunidad para aquellas personas que se quieran informar y debatir sobre política y actualidad tengan un lugar donde obtener esas herramientas y argumentos para hacerlo. El nacimiento de un nuevo medio siempre me parece una buena noticia, no sé si por ser periodista o por ser política. O puede que por las dos.