La «Nasa catalana» al servicio independentista no acaba de ponerse en órbita
Se ha lanzado, de momento, un nanosatélite y los Presupuestos de la Generalitat de 2022 contemplan una inversión de 7 millones de euros
«A su plan de lanzarse a la conquista del espacio sin que les funcione internet, yo es que le veo lagunas». Esta frase la decía hace unos días en el Parlament el presidente del grupo parlamentario del PP, Alejandro Fernández. Una referencia a la llamada «Nasa catalana» después de que el Gobierno catalán tuviera que retrasar la implementación del pasaporte Covid tras el colapso de la aplicación de «La Meva Salut», por el alud de peticiones de descarga.
En definitiva, el dirigente popular pone en cuarentena el proyecto aeroespacial de la Generalitat, al que se le va a dedicar 18 millones de euros en cuatro años. El mismo Alejandro Fernández decía que en materia aeroespacial, con esa cantidad no tendrían «ni para comprar los tornillos de una lanzadera». Y en realidad lo que teme el dirigente popular es que se acabe convirtiendo en una nueva «agencia de colocación» para los «afines ideológicamente».
¿Cuáles son los objetivos de la llamada Nasa catalana? Este proyecto se enmarca dentro de la Estrategia NewSpace de Cataluña, que según dice la propia Generalitat, «desplegará un programa de actuaciones específicas para fortalecer el ecosistema del NewSpace catalán y liderar la generación de conocimiento, su aplicación social y empresarial, y la creación de nuevas soluciones basadas en datos facilitados por el uso de nuevas tecnologías en este ámbito, con el objetivo de fomentar el crecimiento económico y mejorar la vida de las personas».
Esta estrategia se aprobó en octubre del año pasado «para impulsar un nuevo sector económico de alto valor añadido generador de oportunidades de crecimiento económico y de empleo». Y para ello, se van a usar nanosatélites (hasta seis Cube Sat, que pesan menos de 10 kilos). De hecho, la previsión del gobierno catalán es generar 1.200 puestos de trabajo y conseguir una facturación de unos 300 millones de euros hasta 2025, como máximo.
Fondos europeos
La Generalitat, como decíamos, tiene prevista una inversión de 18 millones de euros en cuatro años, financiada en parte con fondos europeos. La previsión para este año era destinar 2,5 millones para el lanzamiento de dos nanosatélites. Pero de momento, sólo se ha lanzado uno, el «Enxaneta», en marzo. Mientras, se espera que el segundo se pueda lanzar el próximo año, aunque todavía no hay una fecha concreta. Por lo demás, y según la consejería de Políticas Digitales, se han llevado a cabo mejoras en la estación de comunicaciones con satélite situada en el Observatorio del Montsec y también en potenciar el uso aeroespacial del aeropuerto de Lleida-Alguaire, que se quiere convertir en una especie de «puerto espacial de Cataluña».
Hasta ahí, es todo lo que, por el momento, ha avanzado la «Nasa Catalana». Sí es cierto que los presupuestos de la Generalitat para el 2022 contemplan por primera vez una inversión para este proyecto, concretamente un poco más de 7,5 millones de euros destinados a la Fundación de Estudios Espaciales de Cataluña - IEEC (esta institución se creó hace 25 años pero desde el año pasado está adscrita a la Generalitat), que contará con una plantilla de 69 personas. ¿Es la agencia de colocación que vaticinaba el popular Alejandro Fernández?
Esta Fundación tendría la misión de desarrollar las actividades relacionadas con el espacio en Cataluña tanto de formación, como de investigación o de desarrollo de proyectos, como es el caso de la estrategia «NewSpace». Pero no es oro todo lo que reluce en el IEEC, y así lo ha hecho constar la Sindicatura de Cuentas en un informe del año pasado. Entre otras cosas, la Sindicatura dice que la Fundación no remitió las cuentas del ejercicio de 2017 a la Intervención General ni a la propia sindicatura.
Pero es que, además, el IEEC suscribió dos contratos con una empresa vinculada con tres investigadores que precisamente realizaban su investigación en la fundación. Una práctica, que según la Sindicatura de Cuentas supone que estas personas «incurrieron en causa de incompatibilidad», teniendo en cuenta la legislación en materia de incompatibilidades del personal al servicio de las administraciones públicas.
El Govern afirmó que el objetivo principal del proyecto es «democratizar el espacio»
Por el momento, parece que este ambicioso proyecto de «Nasa Catalana» que tenía como objetivo «democratizar el espacio», en palabras del vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró, no acaba de despegar. Eso sí, se anunció a bombo y platillo el lanzamiento del primer nanosatélite, que tiene como objetivo mejorar la conectividad en el ámbito del Internet de las Cosas y el 5G. Tal fue el empeño de la Generalitat que hasta se organizó un concurso, desde el programa informativo infantil de la televisión pública catalana, InfoK, para bautizar al nanosatélite. Finalmente «Enxaneta» fue el nombre que resultó elegido.
Pero es que, además, el lanzamiento se pudo seguir en directo, aunque el primer intento no salió bien. Y finalmente el 22 de marzo, un cohete portador Soyuz 2.1a desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, lo puso en órbita.