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Pancartas a favor del acercamiento de los presos de ETA durante una manifestación el pasado mes de agosto en Bilbao

Pancartas a favor del acercamiento de los presos de ETA durante una manifestación el pasado mes de agosto en BilbaoEFE/Javier Zorrilla

Cuatro de los etarras sospechosos de estar detrás del asesinato del magistrado Querol se encuentran ya en libertad

Hoy está llamado a declarar uno de ellos, Mikel Antza, por el asesinato del concejal del PP Gregorio Ordoñez

La cita es esta mañana a las 10:30 de forma telemática. Pero todavía no es seguro que el que fuera máximo líder de la organización terrorista ETA durante 12 años, Mikel Antza, acuda a los juzgados de San Sebastián para comparecer en la Audiencia Nacional. El juez Alejandro Abascal lo ha citado en calidad de investigado para aclarar «su presunta responsabilidad en la toma de decisión de asesinar a Gregorio Ordoñez», dice el auto judicial.

Y existen dudas acerca de la comparecencia de Antza porque el que dirigiera a los asesinos de ETA entre 1992 y 2004 se encuentra en libertad desde hace dos años, aunque se le acumulan las investigaciones por su responsabilidad a la hora de decir las personas que serían asesinadas.

El pasado viernes, sin ir más lejos, el juez Pedraz admitió a trámite la querella presentada por la asociación Dignidad y Justicia para que se investigue quién sabía y dio la orden de asesinar en octubre de 2000 al magistrado del Tribunal Supremo José Francisco Querol mediante un atentado con coche bomba en el que fueron asesinadas tres personas más. Y uno de los terroristas que serán llamados a declarar será nuevamente Mikel Antza.

Miembros del 'Zuba'

El terrorista vasco formaba parte en aquel año 2000 del Zuba, el órgano de dirección de la organización terrorista. Junto a él, otras nueve personas tomaban todas las macabras decisiones de ETA. Se da la circunstancia de que, al igual que Antza, otros tres terroristas de la dirección etarra disfrutan ya de la libertad.

En concreto se trata de otro líder de ETA, Iñaki de Rentería, que se situó al frente de los comandos asesinos también en los años 90. Ignacio Gracia Arregui, a quien se le conoce como Iñaki de Rentería disfruta de libertad desde el año 2011. El etarra tendrá que declarar también por el asesinato de Gregorio Ordoñez, aunque al igual que para la declaración del asesinato de Querol, todavía no hay fecha concreta.

También disfruta de libertad, y desde el año 2008, Vicente Goikoetxea, alias «Willy», que, según los informes policiales, en aquel año 2000 también pertenecía a la cúpula de los terroristas. Algo parecido le sucede a Ramón Sagarzazu, que está fuera de la cárcel desde 2012. Este terrorista fue detenido en 2015 junto a David Pla e Iratxe Sorzabal en la localidad vascofrancesa de Baigorri cuando, según algunas fuentes, intentaba reincorporarse a ETA. Pero como no se pudo demostrar, quedó en libertad.

Autores intelectuales

Son terroristas que, pese a haber formado parte del aparato dirigente de la organización terrorista, no cuentan con delitos de sangre en España, ya que habían pasado la frontera muy jóvenes, apenas iniciada su actividad terrorista en España. De esta forma, normalmente, eran detenidos en Francia y cumplían condenas de cárcel por pertenencia a banda armada. Una vez que cumplían condena en suelo galo, en España no se les podía acusar del mismo delito y, al no tener asesinatos en su haber, quedaban en libertad.

Una vez cumplida condena en suelo galo, en España no podían ser condenados por el mismo delito

Sin embargo, en los últimos meses, las asociaciones de víctimas del terrorismo y la fiscalía están reuniendo pruebas suficientes para, al menos, implicar a las diferentes direcciones de ETA como autores intelectuales de los atentados en suelo español, por haber dado las órdenes para cometer decenas de asesinatos.

Otros terroristas, llegaron al Zuba después de haber participado activamente en atentados y asesinatos en España, por lo que todavía permanecen en prisión por esa actividad. No obstante, el juez Pedraz también les tomará declaración por haber pertenecido al grupo directivo durante el asesinato del magistrado Querol y los otros tres fallecidos en aquel atentado. Se trata de Juan Antonio Olarra Guridi, Ainhoa Múgica Goñi, Javier García Gaztelu, Asier Oyarzábal, María Soledad Iparraguirre y Juan Carlos Iglesias Chouzas

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