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Felipe VI e hijo de Juan Carlos I, observa a Pedro Sánchez durante el pasado Mobile World CongressGTRES

Persecución de la Corona

Sánchez contra Juan Carlos I: cronología de una presión constante

El jefe del Ejecutivo nunca ha defendido a la Corona ni al Rey Juan Carlos, ni siquiera cuando los ataques provenían de sus propios socios de Gobierno

Todo comienza a finales de mayo de 2019. El Rey Juan Carlos I comunica a Don Felipe su voluntad de dejar las actividades institucionales. Un deseo esbozado, meses antes, durante la celebración del 40 aniversario de la Carta Magna. La fecha de retirada de la vida pública coincide con el quinto aniversario del anuncio de su abdicación de la Corona. Pero también con una situación complicada, por encontrarse aún con diligencias abiertas tanto por la Fiscalía Anticorrupción española como por la suiza. Todas ellas archivadas a fecha presente.

Es su propio hijo quien da el primer paso. En plena pandemia, Felipe VI retira la asignación que su padre tenía fijada en los presupuestos de la Casa del Rey. También en marzo de 2020, renuncia públicamente a la herencia que pudiera corresponderle.

Felipe VI apuesta por «preservar el prestigio» y la «conducta íntegra, honesta y transparente» de la Corona. El también jefe del Estado adopta sendas decisiones sin precedentes en la historia de la institución monárquica.

Llega mayo. El presidente del Gobierno se aventura a decir que «lo más duro» de la pandemia ya ha pasado. En seguida le sucede el verano. Pedro Sánchez felicita a los presidentes Feijóo y a Urkullu por sus victorias en Galicia y País Vasco. Seguidamente, inicia su campaña contra Don Juan Carlos, recién salido de España y aún en paradero desconocido: «Lo que se juzga no son instituciones, se juzga a personas». Su socio de Gobierno pide un referéndum nacional sobre la forma de Estado. Sánchez no lo apoya, pero sigue con el dedo en la llaga: «La Casa Real ha marcado distancias frente a estas supuestas conductas que pudieran ser irregulares». El socialista aplaude la marcha del monarca que convirtió al país en un Estado democrático: «La respuesta, a mi juicio, es la que corresponde a una democracia vigorosa».

El Rey Felipe VI, en la Zarzuela. Al fondo, el presidente del Gobierno, Pedro SánchezGTRES

El jefe del Ejecutivo se marcha de vacaciones a Lanzarote. De hecho, se toma más días libres que el año anterior, mientras ni España ni los españoles están aún recuperados ni de la covid ni del batacazo económico. Y cuatro días antes de que Sánchez regrese a su despacho, la Casa del Rey confirma que Don Juan Carlos se encuentra en la capital de Emiratos Árabes Unidos.

La campaña de acoso y derribo de Sánchez contra el Rey Juan Carlos suma decibelios. Su exvicepresidente, Pablo Iglesias y el diputado, Gabriel Rufián, arremeten contra la Corona con dureza. Sánchez tilda de «amenazas ficticias» la campaña frontal que parte de su Gobierno ha abierto contra la Jefatura del Estado. Y continúa así durante todo 2021.

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, durante una de sus intervenciones en el CongresoEFE | Juan Carlos Hidalgo

La Fiscalía suiza archiva las causas contra Don Juan Carlos, y esta es la respuesta de Sánchez: «Creo que el Rey emérito debe dar explicaciones». Una afirmación que Sánchez expresa públicamente nada menos que desde Bruselas, durante una Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno.

Lo más grave llega con el final de la batalla judicial contra Juan Carlos I. Perfilándose durante el pasado octubre el cierre de las tres investigaciones por la Fiscalía del Supremo, el socialista reitera su exigencia en una entrevista: «Sería conveniente que el Rey Juan Carlos dijese, efectivamente, cuál es su opinión sobre todos estos hechos, que son informaciones perturbadoras, y que al final socavan la confianza del pueblo español en todas las instituciones».

Y se llega hasta el pasado febrero. Moncloa guarda silencio una vez se conoce el cierre de todas las causas pendientes contra Don Juan Carlos. Sin embargo y apenas unos días más tarde, Sánchez vuelve a dejar clara su postura hacia la Corona. Y lo hace sin una declaración oficial, incluso conociendo la carta del Rey Juan Carlos que informa que mantendrá su residencia en Abu Dabi, pero que regresará a España para ver a familia y amigos. De hecho, aunque la Casa del Rey ni confirma ni desmiente que la carta de Don Juan Carlos fuera preparada por Felipe VI y conocida de antemano por Sánchez, varias fuentes cercanas a la Casa apuntan que así fue. Por tanto, el presidente del Gobierno era conocedor del comunicado del monarca.

En un corrillo de periodistas y de viaje a un país extranjero, el presidente de España exige que el Rey Juan Carlos dé explicaciones sobre las «informaciones decepcionantes» por los hechos que se le atribuyen. Unos hechos, a 9 de marzo, archivados por todas las jurisdicciones.