El capitán del ‘Villa de Pitanxo’ acusa al superviviente africano de mentiroso

La pasada semana trascendió la teoría alternativa a la tragedia del Villa de Pitanxo, desvelada en exclusiva por El Debate. Esa versión se basa en la palabra del marinero ghanés Samuel Koufie, en concreto en su segunda declaración, realizada el 25 de febrero ya en España. En ese testimonio, enmarcado en la investigación abierta por la Audiencia Nacional, este trabajador contradice en puntos cruciales la historia narrada por el patrón, Juan Enrique Padín Costas. Éste lo acusa de «mentir». Lo hace en una entrevista que hoy publica el diario Faro de Vigo.

«Que se estén contando las mentiras que se están contando, me parece ya no desagradable, es inhumano. ¿Cómo se puede mentir ante esto?», se pregunta el capitán del buque. Cuando se le precisa que Samuel Koufie, uno de los tres supervivientes (el otro es el sobrino del patrón) lo está acusando de negligencia, responde lo siguiente: «Él no lo puede decir. Él puede decir que a cuenta del capitán está vivo. Eso sí lo puede decir porque lo sabe. Lo puedo ver a la cara cuando sea, hoy, mañana o pasado, y decirle que está vivo porque conseguí echar la balsa fuera. Y él lo sabe. Lo único que le puedo pedir es que deje de mentir, que hay familias que no tienen a sus seres queridos al lado».

En la entrevista, el capitán recuerda que, aún en Canadá, él leyó de viva voz su versión ante los otros dos supervivientes: «Los tres estuvimos de acuerdo, el notario nos la leyó y después la firmamos los tres». ¿Qué ha ocurrido? ¿Por qué Samuel Koufie ha variado su testimonio? Insinúa que el marinero ghanés está siendo manipulado por su letrado: «(…) tiene un abogado que parece ser que es el que está llevando o intentando llevar esto por senderos diferentes, con algún medio incluido, y eso es lo que no entiendo».

Se reafirma en su versión

En la entrevista, Juan Enrique Padín Costas se reafirma en su versión de los hechos. Es decir, que el motor se frenó en la maniobra de virada y ese, y no otro, fue el origen de la catástrofe. «El motor se para antes de que entre el agua», recalca. Asegura que él da orden de activar el motor auxiliar, «pero esto no se produce, nunca se llega a encender». Es en ese momento cuando acciona «el protocolo de abandono del buque», al ver que entra cada vez más agua y se agudiza la escora a babor. «Es ahí cuando pulso el abandono y la gente ya sube con los trajes al puente, algunos se los estaban colocando y ya empezamos el abandono en sí», resalta.

No obstante, reconoce que en la lancha de la que él fue rescatado todos los fallecidos (seis) iban sin el traje de supervivencia aunque sí llevaban chaleco salvavidas. Tampoco llevaba traje Samuel Koufie, según afirmó en su segunda declaración.

El marinero ghanés afirmó el 25 de febrero que el capitán, los dos engrasadores y él ayudaron a lanzar esa balsas salvavidas, pero, en su entrevista en Faro de Vigo, el patrón excluye al marinero africano de esta acción.

Samuel Koufie manifestó en su segunda declaración que las maquinillas que se emplean para lanzar y recoger las redes empezaron a tener un funcionamiento anómalo y después se pararon las dos. Añadió que fue en ese momento cuando el buque se empezó a escorar a babor y a entrar el agua. El superviviente africano manifestó además que él y otros de los tripulantes gritaron al capitán que arriase los cables. Según el marinero ghanés, confiaban en que al activar ese mecanismo de seguridad, que suelta de inmediato la red, el buque recuperase la estabilidad. Pero esa orden no llegó, según su relato del 25 de febrero. Así replica el capitán en la entrevista en el diario vigués: «El aparejo lleno nunca viene. Habría una captura, pues sí, pero el efecto de no tener maquinilla en este caso en el que ya falló el principal y no conecta el auxiliar pues no puedes virar. Ni desvirar. Aunque quisiera soltar el aparejo e izar el cable, por decirlo así, tampoco puedes porque necesitas energía».

En esta entrevista exclusiva, Juan Enrique Padín Costas no replica a las denuncias de Samuel Koufie sobre las largas jornadas de trabajo de los marineros o sobre que estos fueron obligados a trabajar con Covid.

Un hijo de fallecido, con Samuel

Un familiar de las víctimas ha reaccionado ya a estas declaraciones. Christopher González, hijo de uno los marineros fallecidos en la catástrofe, ha dicho lo siguiente en el programa Galicia por diante, de la Radio Galega: «Hay dos versiones: la de Samuel y la del patrón. Nosotros creemos a Samuel. Sale ahora el patrón [en Faro de Vigo] siguiendo el guion de abogado, pero si no fuese por los medios yo no sabría que mi padre esta muerto», afirmó esta mañana.

El hundimiento del Villa de Pitanxo en la madrugada del 15 de febrero causó 21 víctimas mortales.