Tribunal Superior de Justicia de Valencia
Mónica Oltra: las claves de una imputada que «conoció» los abusos de su exmarido a una menor y trató de «ocultarlos»
La vicepresidenta de la Generalitat valenciana de Ximo Puig tendrá que comparecer ante el TSJV para aclarar qué supo sobre la agresión sexual y qué hizo tras enterarse de la misma
Para el juez valenciano Vicente Ríos que, en los últimos meses, ha instruido la causa abierta sobre Mónica Oltra por, supuestamente, encubrir los abusos sexuales de su exmarido, Luis Ramírez Icardi, a una menor tutelada por la Comunidad Valenciana en un centro en el que era educador, «no existió ninguna voluntad real de esclarecer» lo ocurrido sino «`por el contrario, ocultarlo». Así de contundente ha sido la conclusión del magistrado, en línea con la tesis de la fiscal superior de Valencia, Teresa Gisbert, a las investigaciones preliminares que, finalmente, llevarán a la vicepresidenta valenciana al banquillo como presunta autora de un delito de encubrimiento agravado por el hecho de ser, además, la máxima responsable de menores e igualdad en la Administración regional.
Oltra tendrá, desde ahora, la oportunidad de contar lo ocurrido y de explicar ante los magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Valencia (TSJV) el próximo 6 de julio a las 10:00 horas, fecha en la que ha sido citada a declarar como aforada, los motivos que la llevaron a presuntamente actuar desatendiendo las obligaciones más esenciales de su cargo y emplear todos los recursos a su alcance en la Consejería de Igualdad «o bien para beneficiar la situación procesal» de su todavía entonces pareja «o bien sencillamente tratar de proteger» su propia «carrera política».
Así las cosas, el nuevo instructor designado para avanzar en las pesquisas, el magistrado Antonio Ferrer tendrá que avanzar en el análisis de las declaraciones de todos los cargos imputados, además de Oltra, para determinar si, como todo apunta hasta la fecha, todos los pasos dados en el Departamento que lidera la política de Compromís, o incluso aquellos que no se dieron, respondían a un propósito muy concreto y se alejados del fin para el que, en esencia, está llamada la Administración Pública.
Por el momento, las pruebas indirectos, valoradas de forma conjunta, apuntan a cómo la conducta de Mónica Oltra tras enterarse de los abusos sexuales cometidos por su exmarido se dirigió «de una manera directa a un propósito muy preciso, de una muy dudosa legalidad» . Esto es, existió una «voluntad concertada» hacia «un plan concertado» en el que se han visto implicados hasta una decena de funcionarios.
No en vano, ha sido ella misma en varias ocasiones quien, públicamente ha reconocido «tanto en el seno de Les Corts como ante los medios de comunicación» que fue ella misma la que dio «la orden de la incoación del expediente reservado». Y, precisamente, esta información ha sido uno de los principales «indicios plurales» empleados por la Justicia para cercar a la política valenciana. Consciente de ello, la vicepresidenta de Ximo Puig trató de «desvincularse de sus anteriores afirmaciones, pero no por ello deja de ser un elemento a considerar, como también lo es que resulta ciertamente increíble que, como llega a afirmar alguno de los investigados, se enteraran de los abusos y de la posible imputación de quien resultó ser el marido de la Sra. Oltra por la prensa».
Prevaricación, omisión del deber y abandono de menores
Sobre la mesa, varios posibles delitos de prevaricación, omisión del deber de perseguir delitos y abandono de menores, que podrían suponer el fin de la carrera política de Mónica Oltra si, finalmente, se demuestra que existieron, por parte de la vicepresidenta valenciana una serie de «trámites orquestados» con la intención de tapar unos hechos gravísimos «tanto por la persona a quien directamente beneficiarían como por la propia relación que presentan con la evolución del proceso penal que trataron de obstaculizar» aún «cuando ello se hiciera en perjuicio de una menor tutelada por la Conselleria de Igualdad». Un catálogo de irregularidades que podrían llevar a Oltra a prisión.
La política valenciana, segunda del socialista Ximo Puig en la Generalitat, «conoció estos hechos desde el principio», en contra de lo «afirmado», «bien por comunicación de alguno de sus subordinados, bien por sencillamente comentárselo su marido, con quien no olvidemos en esos momentos convivía», ha recordado el TSJV en su auto de apertura de diligencias. Una imputación, la de la también consejera de de Igualdad y Políticas Inclusivas que se ha producido a petición del titular del Juzgado de Instrucción Número 15 de Valencia y en el marco de una causa que asciende a 14 imputados más, entre cargos de confianza de la propia Oltra, y funcionarios y personal laboral de la citada Consejería. Sin que, por el momento, no se haya producido ninguna dimisión.