Mónica Oltra, imputada por el presunto encubrimiento de abusos sexuales

Era cuestión de tiempo. Tras salir a la luz que la Fiscalía Superior se había pronunciado favorablemente a que la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, fuese imputada, solo era cuestión de días que sucediese. Y ese día ha sido hoy.

El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) ha anunciado este jueves la imputación de la también consellera de Políticas Inclusivas por ver indicios «relevantes» contra Oltra en la causa abierta sobre el presunto encubrimiento de abusos sexuales de su exmarido Luis Ramírez Icardi a una menor tutelada.

La líder de Compromís, que siempre ha defendido su inocencia, declarará el próximo 6 de julio. Sobre su petición de dimisión incluso antes de ser investigada formalmente, Oltra siempre la ha descartado. «Ni hay ilegalidad, ni falta de ética», ha señalado en múltiples ocasiones ante los medios.

«Existencia de un concierto»

Pero el TSJCV parece no tenerlo tan claro. En su comunicado y tras estudiar el caso, la sala del TSJCV se ha declarado competente para instruir el caso al apreciar «una serie de indicios plurales» que «hacen sospechar la posible existencia de un concierto» entre la aforada y diversos funcionarios para «proteger a su entonces pareja o bien proteger la carrera política de la aforada».

El TSJCV entiende, por tanto, que resulta procedente incoar diligencias previas, de las que será instructor el ponente de esta resolución, el magistrado Antonio Ferrer, «con el fin de investigar hasta qué punto esa sospecha inicial tiene la entidad suficiente como para permitir que el proceso pueda continuar su curso ordinario».

Además, en su escrito el TSJCV señala que la Sala asumirá la causa en su integridad, es decir, también en lo relativo a los otros 13 investigados, entre los que figuran altos cargos de la Conselleria. Considera que existe en este momento en todos ellos «una conexidad inescindible».

Posible dimisión o cese

La imputación de Mónica Oltra supone un hachazo importante al Gobierno valenciano que ya venía sufriendo desde hace meses las voces que pedían el cese o dimisión de la vicepresidenta.

El asunto salpica al propio presidente del Consell, Ximo Puig. Desde la oposición aseguran no entender «por qué no da explicaciones y por qué mantiene a Mónica Oltra tutelando a los menores». Ciudadanos este jueves ha exigido que «Puig la cese fulminantemente o de lo contrario será cómplice».

Sin embargo, tanto Puig como todo el entorno del Pacto del Botánico se siguen mostrando cautelosos y han alegado confiar en la Justicia y en las declaraciones de la vicepresidenta.

Este mismo jueves el presidente de la Generalitat ha reiterado su «respeto a la Justicia y a sus procedimientos» y ha mostrado su «voluntad de que se esclarezca y se tome la decisión que sea más justa». En la misma línea se han expresado desde Compromís. «Queremos reafirmar nuestro apoyo incondicional a su labor dentro de la conselleria y no vamos a permitir que una querella empezada por la extrema derecha no nos permita continuar trabajando», han apuntado.

Únicamente dentro del seno del Consell ha habido una voz discordante, la de la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, quien en unas declaraciones señaló la puerta de salida a Oltra tras conocerse que el juez que instruía la causa había solicitado su investigación.

«Hemos vencido a un Goliat»

La presidenta de Gobiérna-te, la acusación popular en la caso, Cristina Seguí, ha apuntado en un tuit en redes sociales que la imputación de Oltra se ha sucedido gracias a la aportación de todos los que han colaborado con su causa. «En mis carnes he sufrido la expulsión a ruedas de prensa, dos querellas instrumentales de Mónica Oltra y todo tipo de consecuencias de acoso a la puerta de mi casa. Os dije que lo íbamos a hacer. Todo el mundo era escéptico pero lo hemos conseguido. Hemos vencido a un Goliat y vamos a conseguir sin ninguna duda un mejor Gobierno para la Comunidad Valenciana», ha expresado.