Sánchez reivindica ahora a Rubalcaba y exige al PP que deje de usar su memoria

El pacto entre Pedro Sánchez y Bildu para aprobar la Ley de Memoria Democrática ha irrumpido con fuerza en el cara a cara entre el presidente y la portavoz del PP durante el debate sobre el estado de la nación.

Cuca Gamarra ha empezado su intervención pidiendo un minuto de silencio por la memoria de Miguel Ángel Blanco, asesinado hoy justo hace 25 años, y a Sánchez no le ha gustado que sacara el tema de ETA.

Tal es así que el presidente ha defendido su acuerdo con la formación de Arnaldo Otegi y ha recriminado a los populares su actitud: «Quienes han utilizado a las víctimas con fines espurios han sido los dirigentes del PP», ha señalado. Sánchez ha insistido en que su Ley de Memoria Democrática es una reivindicación de «la memoria de todas las víctimas».

En su último turno de intervención ante la portavoz del PP, Sánchez ha afeado al principal partido de la oposición que ahora reivindique la figura y el legado del ex vicepresidente y ex ministro del Interior Alfredo Pérez Rubalcaba. «¿Ese Rubalcaba es al que llamaban cómplice de ETA, agente encubierto de ETA?», ha preguntado a los populares.

El líder del Ejecutivo ha leído una intervención de Rubalcaba en ese mismo hemiciclo en el debate sobre el estado de la nación celebrado en mayo de 2005, porque quería -según ha dicho- ver «qué cara» se les ponía a los populares. Rubalcaba era entonces portavoz del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero era presidente del Gobierno y Mariano Rajoy, líder de la oposición.

Entonces, Rubalcaba afirmó, dirigiéndose a Rajoy: «Usted dijo barbaridades que nunca se han oído en esta Cámara sobre el Gobierno y su política antiterrorista. Usted dijo barbaridades injustas porque se basan en una sospecha desmentida una y otra vez por el Gobierno democrático de España, que es que hay una negociación con ETA. Usted dijo algo que a ningún político se le había ocurrido decir jamás en esta Cámara, usted dijo que el Gobierno estaba traicionando a los muertos del terrorismo», sostuvo.

Y continuó: «Eso es una infamia, es la infamia más grande que he oído jamás en este Parlamento democrático. Es una infamia que además tiene una consecuencia gravísima y es que nunca ningún político democrático ha hecho tanto en esta tribuna por romper lo más preciado que los demócratas hemos tenido en la lucha contra ETA, que es nuestra unidad. Nunca se ha hecho tanto por romper esa unidad, nunca».

A lo que Sánchez ha añadido, esta vez dirigiéndose a Alberto Núñez Feijóo y no a Rajoy: «Han vuelto a las andadas con ETA».