Incidentes provocados por radicales abertzales en Pamplona
La Fiscalía alerta de un aumento de la ‘kale borroka’ de carácter terrorista
Entre los actos de este tipo recogidos en la Memoria Anual destacan depósito de armas y delitos de odio
«Se ha constatado un repunte de actos de actos violentos en el País Vasco y Navarra, subsumidos dentro de la violencia radical de carácter independentista», ha alertado la Fiscalía General del Estado dentro de la Memoria Anual que ha presentado este miércoles.
La Fiscalía achaca este aumento de los delitos de carácter terrorista a la división dentro de la izquierda abertzale, tal y como adelantó El Debate.
Así, la Memoria Anual advierte de que «las nuevas corrientes surgidas en el seno de la izquierda independentista en el País Vasco y Navarra han experimentado un notable crecimiento en su capacidad organizativa y movilizadora a nivel comarcal tras la creación de los ‘Kontseilu Sozialista’ que ha supuesto un paso más en la articulación del Movimiento Socialista como alternativa al proyecto de la izquierda abertzale en el País Vasco y Navarra». Estos 'Consejos Socialistas' son las asambleas comarcales del movimiento GKS, la principal escisión que han sufrido los correligionarios de Arnaldo Otegi.
Depósitos de armas y odio
En el documento califica de «actividad terrorista» un total de 17 delitos cometidos a lo largo del año, entre los que destacan dos delitos de depósitos de armas y un delito de odio. El mayor número de delitos calificados como «terroristas» con 6 cortes ferroviarios o de carreteras, 4 de enaltecimiento del terrorismo, 3 de daños públicos o privados y 1 de colocación de pancartas, además de los delitos de odio y de depósito de armas mencionados.
Respecto a la localización de estos delitos, Navarra es la provincia donde más delitos de carácter terrorista se cometieron a lo largo de 2021 con seis. Sin embargo, llama la atención que ninguna de las 14 detenciones relacionadas con estos delitos se produjo en la Comunidad Foral. Y más cuando en mayo de 2021 se desmanteló el núcleo violento del movimiento GKS en Pamplona con la detención de 11 jóvenes a los que se les incautó manuales para la confección de explosivos y un diseño gráfico para la confección de ‘cócteles molotov’ químicos.