El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (d.), se reúne con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo (i.), en la Moncloa
PP-PSOE
Sánchez ocultó al PP sus candidatos al Constitucional sabiendo que dinamitaría el pacto para renovar el CGPJ
El Partido Popular incluyó el conocimiento de los nombres elegidos como una de las condiciones para cerrar el acuerdo de renovación del Consejo General del Poder Judicial. Sánchez primero contestó con «ambigüedades» y luego se negó a revelar los nombres
Ha pasado un mes desde que el Partido Popular decidiese romper negociaciones con el PSOE para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Una de las razones que revelan que el pacto no estaba, ni mucho menos, cerrado fue la negativa del Pedro Sánchez de revelar los nombres elegidos de los dos magistrados que entrarían en el Tribunal Constitucional.
Este lunes, se hacía pública la elección del Gobierno de escoger al ex ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, y a la ex asesora de Presidencia, Laura Díez, como nuevos miembros del TC. La decisión de Sánchez no sorprendió a los populares, que preveían que esto pudiese ocurrir. Por ello, una de las condiciones para llegar a un acuerdo que permitiese la renovación del CGPJ era, precisamente, esta: conocer los nombres que se elegirían para ocupar dichos puestos. Sin embargo, el presidente del Gobierno y el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, se negaron a revelarlos a la oposición. «Nosotros sospechábamos que podía tratarse de un guiño a Esquerra con una intención de una posible ley de desconexión», reconocen fuentes populares a El Debate.
A pesar de la reiterada petición de información, el Gobierno se negó a dar su brazo a torcer. «Primero fueron ambigüedades y luego negativas», afirman fuentes conocedoras de la negociación.
Con el paso de las semanas, se ha revelado la incógnita para constatar que las sospechas del PP eran verdaderas. Los nombramientos de Sánchez están encaminados a seguir una hoja de ruta. Juan Carlos Campo firmó los indultos a los líderes independentistas catalanes y Laura Díez fue asesora de la Generalitat para la elaboración del Estatut catalán.
El Debate ya apuntaba en informaciones anteriores publicadas en el mes de septiembre, que la intención del presidente del Gobierno era planear nombramientos que le permitiesen la convocatoria de un referéndum en Cataluña.
La otra razón
A pesar de que los socialistas insistieron, e incluso filtraron, que el pacto para la renovación del CGPJ estaba preparado a falta de la firma del PP, la realidad dista mucho de esto. Lo cierto es que los populares no habían conseguido grandes cesiones del PSOE y, por lo tanto, aún había muchos puntos sobre los que discutir. Uno de ellos se erigía como indispensable para dar un paso más.
El PP pidió, desde un principio, que Sánchez se comprometiese a cambiar el sistema de elección de los jueces, algo que nunca consiguieron y que, tal y como reconocen fuentes del partido, dudaban que fuesen a hacer.
Por lo tanto, aunque el pacto saltó al revelarse la intención del Gobierno de suprimir el delito de sedición en compensación por el apoyo de los separatistas a los Presupuestos Generales del Estado, las negociaciones se encontraban ciertamente estancadas, puesto que los socialistas apenas daban su brazo a torcer.
Es importante recordar que desde Europa la presión es cada vez mayor para la renovación del órgano judicial y es precisamente ese el as en la manga que el presidente del Gobierno saca semanalmente para atacar al PP. Por el momento, lo que se ajó hace casi treinta días parece, cada vez, más irreparable.
