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El presidente de Vox, Santiago Abascal, con el primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki

El presidente de Vox, Santiago Abascal, con el primer ministro de Polonia, Mateusz MorawieckiVox

Abascal relanza su imagen más internacional con su visita a Polonia y refuerza sus alianzas europeas

La defensa de las fronteras o de la soberanía nacional son algunos de los puntos que Vox comparte con los países que tiene como aliados en el continente

El líder de Vox continúa afianzando sus alianzas en Europa. El viaje de dos días que este lunes realizó Santiago Abascal a Polonia para reunirse con su primer ministro, Mateusz Morawiecki, ha vuelto a relanzar la imagen internacional que el partido reforzó hace solo unos meses, en el Festival Viva22, y que viene consolidando desde hace unos años.

Invitado personalmente por el dirigente polaco, el presidente de Vox acudió a Varsovia, acompañado del jefe de la delegación del partido en el Parlamento Europeo, Jorge Buxadé, y del eurodiputado Hermann Tertsch. Allí, mantuvieron un encuentro para abordar el futuro de la Unión Europea, en el contexto de guerra en Ucrania, así como la protección de las fronteras comunes.

Se reunieron, además, con el presidente del partido Ley y Justicia, Jarosław Kaczyński, y trataron en la misma línea el futuro de las naciones de Europa y los ataques a la integridad territorial que el país báltico ha sufrido, la más reciente la avalancha migratoria en la frontera con Bielorrusia en noviembre del pasado año.

Y es que Abascal ve en Polonia y, en concreto, en su actual primer ministro, a quien considera un «amigo y aliado», un «ejemplo en la defensa de la libertad, la soberanía de las naciones y la protección de las fronteras». La afinidad entre ambos líderes se vio en el evento político que Vox organizó el pasado octubre. En su discurso, Moraviecki reivindicó las raíces cristianas del Viejo Continente y defendió la idea que comparten tanto el partido de Abascal como sus otros aliados europeos: las naciones soberanas son las que construyen Europa, y no las «élites burócratas» de Bruselas.

El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki (i), junto al presidente de Vox, Santiago Abascal (d)

El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki (i), junto al presidente de Vox, Santiago Abascal (d)EFE

En aquel Viva22, Vox consiguió reunir a varios líderes mundiales, desde la recién elegida presidenta del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, hasta el expresidente de Estados Unidos Donald Trump, pasando por el propio Morawiecki; el líder del partido portugués Chega, André Ventura; el presidente de Hungría, Viktor Orban, el líder de la oposición en Chile, José Antonio Kast, o en Argentina, Javier Milei.

A este encuentro, le ha precedido la primera edición del Festival Viva, donde Meloni pronunció un discurso que tuvo una significativa repercusión mediática y en el que también reivindicó la construcción de «la Europa de los patriotas». Meses después, Vox organizó la Cumbre de Madrid, bajo el lema 'Defender Europa', que reunía en la capital española a líderes como Orbán, Morawiecki, y la líder conservadora francesa, Marine Le Pen, con el objetivo de defender al continente «de las amenazas exteriores e interiores, impulsando una alternativa que haga frente a la deriva globalista».

santiago Abascal y Georgia Meloni

santiago Abascal y Georgia Meloni en el Viva21Twitter de Abascal

Y más recientemente, desde el lugar que ocupa Vox en el Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), celebró también en Madrid la Cumbre de la Iberosfera, que busca afianzar la alianza entre Europa e Iberoamérica en la defensa de la libertad y de los valores de la civilización occidental, ante el avance de la izquierda.

Mirada puesta en las elecciones

Quedan tan solo seis meses para las elecciones autonómicas y municipales, que sin duda servirán para medir los apoyos de cada partido. Sin embargo, las miradas ya están puestas en los comicios generales que, si no se adelantan, se celebrarían en un año. Así, los líderes trabajan en su imagen presidenciable, reforzando su presencia internacional.

El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se ha dejado ver estos últimos meses por Europa y recientemente ha realizado una gira por Latinoamérica. Por su parte, Santiago Abascal viene fomentando alianzas en Europa y al otro lado del Atlántico basadas en la defensa de una serie de valores comunes con la intención de formar una suerte de muro de contención frente al globalismo y la ideología progresista.

El hecho de que líderes de la derecha europea como Morawiecki o Meloni hayan llegado a alcanzar la presidencia de sus respectivos países y muestren un firme apoyo a Vox supone para los de Abascal un estímulo en su carrera por llegar a un futuro Gobierno de España.

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