Vox pide al TC que resuelva su recurso para parar la derogación de la sedición y advierte: «Sánchez sigue con su plan»

Después de que la noche de este lunes se conociera la decisión del Tribunal Constitucional de admitir a trámite el recurso de amparo y las medidas cautelarísimas solicitadas por el Partido Popular para frenar la tramitación de las dos enmiendas que, incluidas en la proposición del PSOE y Unidas Podemos, pretenden modificar las leyes que regulan el funcionamiento del Consejo General del Poder Judicial y del TC, Vox ha pedido al Constitucional que resuelva su recurso de amparo y su solicitud de medidas para evitar que continúe la tramitación de la proposición de ley íntegra.

La formación que preside Santiago Abascal incorpora en su recurso, además de las dos enmiendas relativas a modificar las leyes orgánicas del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional, el delito de sedición, cuya derogación consideran que es una «amnistía encubierta», y también el delito de malversación de caudales públicos.

«La decisión del Tribunal Constitucional debería detener, de momento, el asalto de Sánchez. Pero no hay nada ganado, porque sigue con su plan de perpetuarse. Es capaz de desoír al Tribunal», escribió Abascal en su cuenta de Twitter tras hacerse pública la decisión del Tribunal de Garantías, y aseguró que continuarían trabajando «para detenerlo de forma definitiva» con una moción y más acciones judiciales.

Más tarde, y después de la comparecencia de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; el presidente del Senado, Ander Gil; el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y la portavoz del PSOE en el Senado, Eva Granados, el líder de Vox hizo hincapié en su idea y advirtió: «Sánchez sigue con su plan. Y su plan es sencillo: pactar con los golpistas, otorgarles inmunidad por los crímenes que cometieron y permitirles repetirlos». Y aseveraba en redes sociales: «Todo lo demás es ruido».

Esta misma mañana, respecto a la declaración de Batet, el vicepresidente cuarto de la Mesa del Congreso y diputado de Vox, Ignacio Gil Lázaro, considera que tal declaración, efectuada sin haber informado previamente a la Mesa, «antepuso un interés de parte a su condición arbitral de representación del conjunto de la Cámara» al situarse la presidenta «frente a los recursos legítimos de amparo» que han interpuesto el PP y Vox ante el TC. El parlamentario señala, en este sentido, que el de Batet fue un «parecer unipersonal» que «no representa la opinión del conjunto» del Congreso, y, en calidad de vicepresidente, remarca que la decisión del Tribunal de Garantías «viene a proteger el derecho fundamental de los diputados a la participación».