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José Luis Corcuera, ministro de Interior del PSOE entre 1988 y 1993, en la sede de El DebateAlfonso Úcar

En Defensa de España

José Luis Corcuera: «Espero que los españoles no olviden la ausencia de compromiso con la verdad de Pedro Sánchez»

El exministro de Interior del PSOE visita El Debate para realizar su balance político del pasado 2022 y trazar el pronóstico de cara al entrante 2023, año electoral donde los haya

Destacado sindicalista de UGT en el sector del metal durante la Transición, diputado, ministro de Interior, donde sobresalió por su labor en la lucha contra el terrorismo de ETA, secretario ejecutivo de la comisión ejecutiva federal del PSOE... José Luis Corcuera es una de las figuras con mayor relevancia pública que ha dado el socialismo español en las últimas cuatro décadas.

–Nicolás Redondo ha fallecido hace escasos días. Me gustaría conocer su valoración sobre esta figura histórica de UGT.

–Una persona excepcional; y no sólo desde el punto de vista sindical, sino también porque Nicolás fue una pieza importantísima a la hora de contribuir a ese gran ejercicio de concordia que fue la Transición. Sin el sentido de responsabilidad del que dieron muestra tanto CC.OO. como UGT, la Transición no se hubiera desarrollado tal y como afortunadamente transcurrió. Generaron las condiciones para que se pudiera redactar la Constitución, posteriormente aprobada en votación por los españoles.

Nicolás Redondo fue una pieza importantísima a la hora de contribuir a ese gran ejercicio de concordia que fue la Transición

–Usted vivió la Transición en primera línea de acción política y sindical. ¿Cuál es su valoración personal de aquellos años?

–La Transición la hicieron, entre otros, gente que se libró de la cárcel por los pelos, gente que estuvo años en la cárcel, gente que estuvo muchos años en la cárcel, y gente que tuvo que irse al exilio. Y la hicieron junto a otras personas que creyeron que era imprescindible un régimen democrático de libertades, aunque vinieran de la dictadura de Franco.

La Transición la hicieron, entre otros, gente que se libró de la cárcel por los pelos, gente que estuvo años en la cárcel, gente que estuvo muchos años en la cárcel, y gente que tuvo que irse al exilio

La Transición fue un ejercicio de concordia imprescindible. Entre los que ahora buscan desacreditar este ejercicio de concordia, muchos ni habían nacido, y otros no tenían diez años cuando todo aquello ocurrió. Son antifranquistas tardíos, antifranquistas de salón.

José Luis Corcuera, exministro de Interior del PSOE, durante un momento de la entrevista en la sede de El DebateEl Debate

La concordia con acuerdo

–No parece que hoy sea predominante, al menos entre los socios de Gobierno de Pedro Sánchez, la visión de que la Constitución es el resultado de un gran acto de concordia colectiva.

–Les escuchamos decir que hay que cambiar la Constitución. Ninguno de ellos dice que la primera Constitución que en España ha sido votada por todos los españoles es la Carta Magna de 1978. A raíz de esto, dos precisiones.

–¿La primera?

Los españoles votamos un régimen político que es la monarquía parlamentaria. Muchos de los países más avanzados socialmente hablando tienen un sistema político de monarquía parlamentaria como el nuestro. Los países escandinavos han sido siempre un ejemplo.

–¿Y la segunda?

A los independentistas, fundamentalmente a Esquerra Republicana de Cataluña, que abundan todos los días en la reivindicación de una república catalana, convendría recordarles que la Constitución española tuvo más votos en Cataluña que los votos que tienen hoy todos los partidos políticos con representación en el parlamento catalán.

–Sin embargo, no deja de resultar llamativo el aire de 'hiper-democracia' que los representantes de ERC suelen adoptar en sus intervenciones.

–¿Cómo voy a aceptar yo lecciones de Esquerra Republicana? Nada más comenzar la II República, el 14 de abril, Francesc Macià declara la república catalana. ¿Cómo voy a aceptar lecciones de democracia de quienes intentaron dar un golpe de Estado contra la propia República en 1934? Me refiero a Lluís Companys, que fue condenado a 30 años de cárcel por la II República por aquel intento de golpe, que causó decenas de muertos.

Para no judicializar la política, lo que tienen que hacer es no cometer delitos

Decía el propio Macià, y cito textualmente: «De los barrios bajos que hemos señalado, y al decir barrios bajos quiero decir España, son hijas todas las prostitutas de calle y de cabaret que envenenan la vida de nuestra juventud». No voy a aceptar que los discípulos de este señor, el fundador de Esquerra Republicana, de quien nunca han renegado, pongan en cuestión la Constitución y que nos den lecciones de democracia.

–¿Qué opina sobre el concepto de la «desjudicialización de la política»?

–Lo que tienen que hacer para no judicializar la política es no cometer delitos.

José Luís Corcuera en la sede de El DebateEl Debate

Maese Otegi

–Estamos hablando mucho del independentismo catalán, pero el independentismo vasco también tiene una longa manus que llega hasta la Moncloa, tal y como el propio Arnaldo Otegi no tiene reparo en reconocer.

–¿Cómo es posible que Otegi diga que hay un Gobierno progresista? ¿Otegi representa ideas progresistas? ¿Cómo es posible asistir sin rechazo a estas expresiones? ¿Cuánto tiempo hace que el Parlamento Europeo rechazó en pie de igualdad las ideas nazis y las ideas estalinistas? Las ideas de Hitler y las ideas de Stalin son igualmente rechazables en una sociedad democrática.

¿Cómo es posible que Otegi diga que hay un Gobierno progresista? ¿Otegi representa ideas progresistas? ¿Cómo es posible asistir sin rechazo a estas expresiones?

¿Cómo es posible que comunistas que defienden regímenes totalitarios vengan a darnos lecciones de democracia? No acepto, bajo ningún concepto, que algo así pueda ocurrir. ¿Cómo es posible que alguien pueda defender que la democracia es una manifestación, por muy numerosa que sea la manifestación? La democracia la representa la ley; esa Constitución que fue votada por el pueblo, por la mayoría del pueblo.

–La siguiente cuestión suelo formulársela a personas que han militado o militan en fuerzas de izquierdas, pero que están descontentos con el progresismo actualmente hegemónico. Parafraseo a Zavalita para preguntarle: ¿en qué momento se fastidió la izquierda?

–En el día en que un populismo pretendidamente de izquierdas se hizo visible en España. En el día en el que comenzamos a ver con naturalidad cómo desde la Puerta del Sol se desprestigiaban las instituciones democráticas españolas. Quienes organizaban eso representaban, según ellos, la voluntad de todo el pueblo español. Y no. En realidad, son fascistas de izquierdas. A partir de entonces empezaron a ocurrir ciertas cosas.

–Lo cierto es que los primeros intentos de asalto al congreso no tardaron en llegar.

–Que alguien pretenda intimidar la sede donde reside la soberanía popular, con manifestaciones del tipo que sea, tiene que ser rechazado absolutamente de raíz, tal y como exactamente ha ocurrido en Brasil.

Nunca podemos ver con normalidad lo que no es más un populismo rechazable, aunque se vista de izquierda progresista. Quien defiende al régimen de Maduro en Venezuela, quien defiende regímenes totalitarios donde sólo unos pueden votar y esos unos son los miembros del partido único, que no nos digan que eso es una democracia. En el fondo son gente reaccionaria, contraproducentes para cualquier país, gente peligrosa. Si alguien quiere cambiar la Constitución, que la cambie por los procedimientos que la Constitución establece, no por atajos o por la puerta de atrás.

El exministro del PSOE José Luis Corcuera durante su entrevista en la sede de El DebateEl Debate

Pedro Sánchez: las palabras y las cosas

–Ahora que el 2022 todavía está fresco en el recuerdo, ¿qué opinión le merece la acción política desarrollada por el Gobierno de Pedro Sánchez durante el pasado año?

–De las políticas del presidente Pedro Sánchez muy pocas cosas me sorprenden ya. Uno está habituado a ver como dice una cosa y posteriormente hace la contraria. Desgraciadamente, los españoles han perdido la cuenta. La desaparición del delito de sedición, por ejemplo, me parece uno de los principales errores qué ha cometido este Gobierno.

Otro ejemplo. Cuando Pedro Sánchez hizo su campaña electoral y dijo con quién iba gobernar y con quien jamás gobernaría. Pasadas las elecciones, hizo justamente lo contrario de lo que había dicho. Es una ausencia de compromiso con la verdad que espero que los españoles no la olviden.

Algunos de los riesgos que preveo para el futuro no se producirán en 2023, porque al ser un año electoral bajarán el diapasón

–¿Qué pronósticos políticos se atrevería a realizar para el 2023?

–Los riesgos que preveo para el futuro no se producirán en 2023, porque al ser un año electoral tendrán sumo cuidado. Bajarán el diapasón para que haya tranquilidad institucional.

–Pongamos que el Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez consigue revalidar su permanencia en la Moncloa y tiene una nueva legislatura por delante.

–¿Pedro Sánchez es un hombre fiable en aquellas cuestiones que tienen que ver con lo nuclear de nuestro ordenamiento jurídico? No, al menos para mí. Cuando oigo hablar de consultas no vinculantes me pongo en guardia automáticamente. Las fórmulas imaginativas que dicen tener algunos para satisfacer a los independentistas, para mí resultan tan peligrosas como aquellas que desde su raíz son ya peligrosas.

Jamás depositaré mi confianza en quien no defienda la Constitución

Jamás depositaré mi confianza en quien no defienda la Constitución. No podré bajo ningún concepto dar mi confianza a aquellos que utilicen ingeniería social o ingeniería jurídica para pasar por encima de los preceptos constitucionales.

José Luis Corcuera conversando durante la entrevistaEl Debate

Comunistas, les recibimos con alegría

–Yendo al núcleo del asunto, ¿resulta compatible que un partido socialdemócrata como es el PSOE gobierne con fuerzas de izquierda radical y/o independentistas?

–¿Me puede decir usted algún país en Europa occidental donde en estos momentos haya una socialdemocracia que gobierne con comunistas, con populistas de izquierdas? Ninguno. Hay países en Europa donde la socialdemocracia gobierna con los conservadores de centro. No hay ningún ejemplo en Europa donde la socialdemocracia esté gobernando con partidos de corte comunista. Ninguno, excepto España.

No hay ningún ejemplo en Europa donde la socialdemocracia esté gobernando con partidos de corte comunista. Ninguno, excepto España

–¿Por qué motivos cree que se produce esta excepcionalidad española?

–Probablemente tenga que ver con los años de dictadura que tuvimos. Probablemente también tenga que ver con una idealización de la II República.

–Volvemos de nuevo a la II República, periodo que, según transcurren los años, parece estar cada vez más presente.

–Aquí suceden varias cosas curiosas. Hacemos un acto de justicia reivindicando a Clara Campoamor y ponemos su nombre a una estación, a una calle o a un parque porque, efectivamente, fue una mujer que defendió el voto femenino. Y lo hizo muy bien. Pero ¿nos preguntamos alguna vez por qué Clara Campoamor se exilió a Lausana en septiembre de 1936? Huyó de Madrid, que entonces era una ciudad republicana.

Los principales actores de la II República, incluido Manuel Azaña, reconocen en sus últimos años de vida que se cometieron múltiples errores antes de la Guerra Civil y durante la misma

¿Por qué no leemos el libro que Clara Campoamor publicó en 1937, me refiero a La revolución española vista por una republicana, y nos enteramos de qué pensaba ella sobre la II República? Los principales actores de la II República, incluido Manuel Azaña, reconocen en sus últimos años de vida que se cometieron múltiples errores antes de la Guerra Civil y durante la misma. Recomiendo en especial la lectura de Causas de la Guerra de España, el último libro que escribió Manuel Azaña poco antes de morir en 1940.

–La Ley de Memoria Democrática no transita precisamente por esos predios…

–Existe la tendencia a magnificar la II República y a denigrar la mayor operación política que se ha hecho en la España contemporánea, que fue –nunca me cansaré de decirlo– ese gran acto de concordia que generó la Constitución de 1978. La Ley de Memoria Democrática trata de desvirtuarlo empleando con sectarismo la memoria, cuando la memoria debiera ser dejada a los historiadores.

Al señor Félix Bolaños, ya que él es el estandarte de la Memoria Democrática, le pongo hablar mañana mismo sobre Marcelino Valentín Gamazo. Estaría encantado de que debatiéramos juntos, mañana mismo, o cuando él quiera, sobre la figura del fiscal general de la II República.

El expresidente del Gobierno Felipe González y Ramón Rubial (1906 - 1999), presidente del PSOE desde 1976 hasta su muerteFundación Felipe González

La memoria de Rubial y las memorias

–Usted ingresó en el PSOE y la UGT en el segundo semestre de 1974, siendo clandestinas por entonces ambas organizaciones. ¿Los entornos socialistas han realizado siempre la lectura sobre la Historia Contemporánea de España que ahora quieren proyectar desde el Gobierno?

–Probablemente la figura del socialismo español que yo más respeto es Ramón Rubial. Con muchos años en la cárcel. Cuando los jóvenes hablábamos, naturalmente no lo hacíamos bien, pero él nos escuchaba.

Cuando despotricábamos contra la dictadura de Franco, Ramón Rubial nos decía: «no os falta razón, pero no olvidéis nunca que nosotros cometimos muchos errores, y no precisamente veniales»

En aquellos años en los que yo entré en la organización despotricábamos contra Franco. Y él nos decía: «no os falta razón, pero no olvidéis nunca que nosotros cometimos muchos errores, y no precisamente veniales».

–¿Esto se lo decía Ramón Rubial?

Esto nos lo decía Ramón Rubial, con 20 años de cárcel en la dictadura de Franco. ¿Cómo voy a comparar yo esto que decía Ramón Rubial con un socialista que se sube a la tribuna a hablar de golpes con tricornios? ¿Qué relación puede guardar una figura como Ramón Rubial con un personaje que tiene una intervención de esa naturaleza en el Parlamento de España? Si usted compara, le saldrán un sinfín de conclusiones.