Tierra, trágales
Retratados: así pusieron Cs, el PNV y el PSOE la mano en el fuego por la ley del 'solo sí es sí'
El 26 de mayo, la norma fue aprobada por el pleno del Congreso antes de ser enviada al Senado. En aquel debate hubo intervenciones de algunos portavoces muy llamativas, vistas en perspectiva
Algunos de quienes ahora se llevan las manos a la cabeza por los efectos perversos de la ley del 'solo sí es sí' fueron firmes defensores de una norma que, según Irene Montero, iba a convertir España en un país «más libre y más seguro para todas las mujeres». Empezando por Pedro Sánchez y el PSOE.
En los diarios de sesiones de las Cortes han quedado plasmados, para la posteridad, los encendidos debates que se produjeron en el Congreso y el Senado durante su larga tramitación parlamentaria. Como también las advertencias del PP y de Vox, por más que desde el Ministerio de Igualdad aseguren que nadie, jamás, advirtió de lo que podía pasar con las penas mínimas tras unificar el abuso y la agresión sexual en un solo tipo penal.
El pasado 26 de mayo, la ley del 'solo sí es sí' fue aprobada por el pleno del Congreso antes de ser enviada al Senado (después hubo que celebrar una segunda y definitiva votación en la Cámara Baja el 25 de agosto porque durante el trámite en el Senado sufrió las últimas modificaciones). Votaron a favor 201 diputados del PSOE, Unidas Podemos, Ciudadanos, Junts per Catalunya, el PDeCAT, ERC, Bildu, el PNV, Más País, Compromís, el BNG, Coalición Canaria, Teruel Existe y la exdiputada de Unidas Podemos Meri Pita.
Por entonces la pelea entre los dos socios del Gobierno no era por las penas, ni por la unificación de tipos, ni por los agravantes de violencia e intimidación. Nada de eso. Los socialistas habían intentado introducir en el texto normativo varias enmiendas relativas a la abolición de la prostitución, pero los morados se negaron.
Ciudadanos
El debate sirvió para retratar a cada cual. Entre ellos, a Ciudadanos, que entonces votó a favor y ahora es de los más críticos con el desaguisado provocado. La diputada de Cs Sara Giménez hizo suya la ley del 'solo sí es sí' desde la tribuna del Congreso aquel día: «Pido que no se diga que esta ley es de un partido o de otro; esta ley es una mejora de país, una mejora en la protección de las mujeres, y es así como la tenemos que tratar y la tenemos que defender», afirmó.
También se felicitó por el hecho de que el proyecto de ley hubiera recogido algunas sugerencias de los órganos consultivos del Estado en lo referente al consentimiento: «Es una legislación que ha sido mejorada en el ámbito del consentimiento, una legislación que ha incorporado la jurisprudencia del Tribunal Supremo en el ámbito del consentimiento, que ha incorporado las recomendaciones del Consejo General del Poder Judicial y del Consejo de Estado en materia de consentimiento», enumeró.
PSOE
Por su parte, la diputada del PSOE Laura Berja, defendió que era una ley de todo el Gobierno. No como ahora, que los socialistas están tratando de trasladar a sus socios toda la responsabilidad de una norma que, como el propio Sánchez reconoció este martes ante sus diputados y senadores, «ha tenido algunos efectos indeseados en su aplicación».
«Señorías, esta ley es una ley del Gobierno, pero también es una ley de un compromiso firme del PSOE. Es una buena ley, que nadie tenga ninguna duda, una ley que este partido, el PSOE, ha defendido desde el principio y en la que hemos trabajado desde el principio», señaló Berja en aquel pleno. E incluso recriminó al PP y a Vox sus advertencias: «Las mujeres estarán tan bien protegidas como tan buena es esta ley, la ley del 'solo sí es sí'. Por lo tanto, de verdad, dejen de manipular y de mentir», pidió a la bancada de la derecha.
PP
¿Y cuáles habían sido esas advertencias? Ese día, la diputada del PP Marta González avisó desde el atril de oradores algo de lo que ya había avisado previamente en la Comisión de Igualdad: «Otra de nuestras objeciones, como saben, tiene que ver con la desaparición de la tipificación como abuso sexual de las conductas menos graves y la conversión de todo tipo de comportamiento en agresiones sexuales, lo que hace que se aumente la horquilla de las penas para atender, precisamente, los casos más leves. Esto puede suponer, como saben muy bien ustedes, paradójicamente, que lo que antes eran agresiones sexuales que conllevaban una pena grave ahora vean rebajado su castigo», afirmó la popular. Y exactamente eso es lo que ha pasado.
PNV
El PNV, que votó a favor, no puso pegas más allá del «tono centralizador» de la ley «en materias claramente autonómicas». «La fuerza y sentido político y social del 'solo sí es sí' tiene suficiente entidad para ser validado, y es el leitmotiv, es el que ha defendido y mantenido nuestro grupo desde el principio», destacó el diputado Joseba Agirretxea.
Bildu
Ningún partido del bloque de legislatura lo vio venir. De hecho, ERC y Bildu cuestionaron el afán demasiado punitivista de la ley. «No compartimos el punitivismo que recorre toda esta ley, ya que hay cuestiones que deben resolverse de otra manera. No todo se soluciona con el Código Penal. La libertad sexual de las mujeres se construye en el ámbito de las libertades y de los derechos, apoyando la afirmación de sujetos activos, y se construye menos o nada siguiendo los tortuosos caminos del procedimiento penal y sus derivas punitivistas», señaló la diputada abertxale Bel Pozueta.
ERC
Por su parte, la diputada de Esquerra Pilar Vallugera añadió durante el debate: «Respecto al aspecto punitivo de la ley, comparto que no se resuelve casi nada con el endurecimiento del Código Penal, casi nada, porque lo que refleja son las tensiones que hay en el seno de la sociedad». Y continuó: «Al final, si damos este mandato es porque los jueces, la judicatura, en general, estaba funcionando no como un aliado de las víctimas, sino como su verdugo. Por eso hemos tenido que dar instrucciones más claras a los señores jueces sobre qué se puede hacer, qué no se puede hacer y cómo se debe condenar cuando hay estas agresiones sexuales, que en ocasiones son inimaginables, y su tratamiento en sede judicial era revictimizador, era absolutamente humillante para la víctima y absolutamente poco reparador de cara a la sociedad».
Coalición Canaria
Tampoco la veterana diputada de Coalición Canaria Ana Oramas puso peros. De hecho, se felicitó por el grado de consenso alcanzado en la Cámara: «Hoy se hace un avance importante y, desde luego, en Coalición Canaria vamos a apoyar este proyecto, que, además, se ha hecho fuera de temas ideológicos y con consenso político, y eso es lo que hay que hacer», proclamó.
Más País
Por parte de Más País, la diputada Inés Sabanés también alabó las bondades de la ley del 'solo sí es sí': «Esta ley no solo protege a las víctimas, sino que impugna una cultura de la sospecha permanente sobre las mujeres y es la cristalización de un movimiento, un movimiento feminista que ahora mismo es el más transversal, democratizador y transformador que tenemos. Hoy, señorías, es un día de celebración», dijo.
Unidas Podemos
El único grupo parlamentario que hoy está en el mismo lugar donde lo estaba en aquel debate es Unidas Podemos. La ministra de Igualdad proclamó aquel día de mayo: «¡Claro que las herramientas del feminismo no son fundamentalmente punitivas! Pero necesitamos que el Código Penal también sea feminista y también nos ayude a defendernos de las violencias que sufrimos».
Montero, además, calificó de «ruido reaccionario» las advertencias del PP y Vox. «La libertad sexual de las mujeres, señorías de la derecha y de la extrema derecha, va a ser una realidad a pesar del ruido reaccionario; va a ser una realidad a pesar de la extrema derecha; va a ser una realidad a pesar de los agresores y también a pesar de la justicia patriarcal. Ustedes hacen mucho ruido, pero hoy, señorías, les demostramos que las feministas somos más», zanjó.