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El líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, este viernes, tras el fin de la política de dispersión de presos etarrasEFE / Juan Herrero

Los secesionistas y Podemos aplauden a Sánchez por el fin de la dispersión de los presos de ETA

Bildu, PNV, ERC y Podemos celebran que todos los terroristas etarras cumplan sus condenas en cárceles vascas y navarras pese a que no han colaborado en el esclarecimiento de 379 crímenes aun por resolver

Este viernes se efectuaba el fin de la dispersión de los presos etarras y con ello se acababa con la política llevada a cabo por los distintos gobiernos desde 1989 para combatir a la banda terrorista ETA.

Una medida que comenzó el PSOE de Felipe González y había funcionado durante los mandatos de José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy.

Con el acercamiento de los últimos cinco condenados etarras a las cárceles vascas y navarras el Gobierno de Pedro Sánchez, cumpliendo con las exigencias de la izquierda abertzale, liquida esta medida de presión en un momento en el que todavía quedan por resolver 379 de los crímenes cometidos por la banda durante su más de medio siglo de historia.

Uno de los primeros en reaccionar a esta nueva realidad fue Arnaldo Otegi, coordinador general de EH-Bildu, quien, pese a «compartir esta alegría» con «los familiares de los presos que han mantenido su dignidad pese a tener que recorrer miles de kilómetros y sufrir todo tipo de abusos y vejaciones», no se mostraba del todo satisfecho y pedía más.

«Aún hoy existen políticas de excepción contra los presos que deben dejar de aplicarse para afianzar la convivencia», señalaba Otegi el viernes, quien tildaba el proceso de «repatriación». «No podemos olvidar tanto dolor y padecimiento», añadía quien en su momento perteneció a la banda terrorista.

Para Podemos, el fin de la dispersión es «una buena noticia para los derechos humanos»

La portavoz parlamentaria de Elkarrekin Podemos-IU –Unidas Podemos en el País Vasco–, Miren Gorrotxategi aseguraba, también el viernes, que el fin de la dispersión era «una buena noticia para los derechos humanos».

«Cumplir condena cerca del lugar de residencia es imprescindible para la reinserción. Y esas condenas nunca debieron cumplirlas las familias», añadía la dirigente de esta coalición en la que también está integrado el partido ecologista Equo.

Según el PNV, favorece la convivencia

Al evidente jolgorio en el seno de la izquierda vasca, se sumaba después la satisfacción –tampoco completa– del Partido Nacionalista Vasco. El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, apuntaba este mismo sábado al carácter positivo del fin de la dispersión, que, a su juicio, «ya no tenía ningún sentido».

El dirigente del PNV afirmaba que este era un «paso importante más hacia la convivencia en este país –en referencia a lo que llaman Euskal Herria–», aunque también pedía reconocimiento al «daño injusto causado» por ETA y su entorno político.

Siempre es bueno poner justicia allí donde hay injusticiaOriol JunquerasPresidente de ERC

La noticia también se ha valorado positivamente lejos del País Vasco. El presidente de ERC, Oriol Junqueras, se congratulaba este sábado de la conclusión a la medida impulsada por Sánchez: «Siempre es bueno poner justicia allí donde hay injusticia y siempre es bueno ayudar en el camino de la paz y la democracia».

División entre las víctimas

La presidenta de COVITE, Consuelo Ordóñez, por su parte, consideraba tras conocer la noticia que la dispersión ya «no tenía ningún sentido» y que «lo importante» es que se cumplan las condenas.

«Este Gobierno, por lo menos, ha sido transparente», ha señalado Ordóñez, quien tildaba de «inteligente» la medida al «quitar ese victimismo» al entorno de ETA que hoy encarna la izquierda abertzale.

Una opinión diametralmente opuesta a la de la AVT, que acusaba al Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos de ser «el responsable de haber generado un dolor infinito e innecesario a las víctimas del terrorismo». «Este Gobierno está con los terroristas, no con sus víctimas», apuntaban en un comunicado.

Desde el PP vasco, una formación que sufrió en primera persona y en numerosas ocasiones la violencia de la banda armada, ha considerado el fin de la dispersión como un «escarnio a las víctimas» de ETA.

El presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, apuntaba el viernes a que «Sánchez ha pagado la primera parte de la factura a Otegi acercando a todos los criminales de ETA con o sin arrepentimiento».

Este sábado, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la misma dirección, apuntaba a que «los favores de Sánchez a ETA son inmorales» y se mostraba sorprendida de que «una parte de los españoles» no se escandalizara por estos hechos.