Tras el fin de la dispersión
Otegi muestra su alegría por los etarras y sus familiares; ni una palabra para sus víctimas
Bildu señala los próximos pasos de la hoja de ruta: «reconocimiento y reparación» y «un horizonte sin presos ni refugiados políticos»
«Sin duda nos queda camino por recorrer», ha afirmado este viernes Arnaldo Otegi. Podría parecer que es un reconocimiento de que algo ha hecho mal. Pero no hay que confundirse. El líder de Bildu ha aclarado que «aún hoy existen políticas de excepción contra los presos que deben dejar de aplicarse para afianzar la convivencia». Todas las palabras expresadas este viernes por Otegi se han dirigido a los presos de ETA y sus familiares. Ni una mención a los 854 muertos y miles de heridos que esos presos provocaron en ninguno de los siete puntos de que consta el comunicado que ha leído el líder de la izquierda abertzale.
«Compartir la alegría»
Otegi no ha ocultado su felicidad y los primeros con los que ha querido «compartir esta alegría» ha sido «con los familiares de los presos que han mantenido su dignidad pese a tener que recorrer miles de kilómetros y sufrir todo tipo de abusos y vejaciones». Ni una palabra para las víctimas del terrorismo de ETA.
Tampoco ha hecho mención a las palabras que él mismo expresó el 21 de octubre de 2021 cuando aseguró que «si para tener los presos en casa tenemos que votar los Presupuestos, votaremos los Presupuestos» a pesar de que este viernes ha sido el día en que esas palabras se han hecho realidad.
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Por lo demás, Otegi ha recuperado las palabras y expresiones de los peores tiempos del terrorismo. Ha hablado de «repatriación» para referirse al traslado de los etarras al País Vasco. Los nombra como «presos y refugiados políticos». Y, por supuesto, no se olvida de la «dignidad de los familiares de los presos».
A partir de ahí, Arnaldo Otegi ya ha lanzado a Pedro Sánchez sus próximas exigencias: «Nuestro se merece un futuro de reconocimiento y reparación de todas las víctimas y un horizonte sin presos, refugiados ni deportados políticos». Así que el presidente del Gobierno ya sabe lo que tiene que hacer en caso de que necesite los votos de Bildu después de las próximas elecciones generales de diciembre.