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La ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero

La ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús MonteroEFE / Fernando Alvarado

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El PSOE eleva la presión sobre Podemos para que pacte ya con Sumar

A los socialistas no les conviene que el voto a su izquierda se diluya entre dos formaciones, ya que la fragmentación reduciría unos escaños que se pueden tornar en imprescindibles de cara a conformar un nuevo Ejecutivo de coalición

La ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, ha elevado la presión sobre Podemos para que pacte ya con Movimiento Sumar una coalición para las elecciones generales del próximo 23 de julio.

«El electorado progresista no puede depositar su voto en alguna formación que no tenga perspectiva de obtener representación institucional», ha señalado Montero en una entrevista en Antena 3. «Lo que esperamos en el PSOE –ha añadido– es que el espacio a la izquierda del PSOE se configure de manera que pueda tener mayor rentabilidad en términos electorales para seducir al electorado que no quiera votar al PSOE».

Y es que a los socialistas no les conviene en absoluto que el voto a su izquierda se diluya entre dos formaciones, ya que la fragmentación reduciría unos escaños que se pueden tornar en imprescindibles de cara a conformar un nuevo Ejecutivo de coalición.

Así lo reflejaba, por ejemplo, la última encuesta de 40dB para varios medios de Prisa, en la que se indicaba que si ambas formaciones acudían por separado, los 'morados' pasarían de sus 35 escaños actuales a apenas 11 asientos en la Cámara Baja. Sumar, a su vez, en este escenario lograría 27, lo que haría crecer en tres los representantes que tiene actualmente en el Congreso de los Diputados el partido liderado por Ione Belarra.

El tiempo se agota

Si Podemos se integrase finalmente en Sumar, como tratan de negociar a toda prisa y con el tic tac del reloj sonando cada vez más fuerte –el plazo para presentar las coaliciones finaliza este mismo viernes–, el espectro de la izquierda radical conseguiría hasta 55 diputados. Unos números que le facilitarían enormemente a Pedro Sánchez de cara a conformar un nuevo Ejecutivo «progresista».

«Que se aproximen a los datos de las elecciones autonómicas y municipales porque ahí puede haber parte de pistas que ayuden a conformar ese espacio», ha abundado Montero sobre este asunto, apuntando a fenómenos como el 'efecto Huesca', ciudad donde las cuatro formaciones políticas de la izquierda radical fueron cada una por su lado y con casi el 18 % del total de las papeletas se quedaron sin concejales en el Ayuntamiento, al no alcanzar ninguna de ellas el 5 % necesario para entrar en las instituciones.

Estas declaraciones se producen en un momento en el que cada vez más voces dentro de Podemos llaman a acordar esa coalición con la plataforma de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. El problema es que, aunque no lo admitan abiertamente, con nombres y apellidos, la cabeza a cortar para que los 'morados' se integren en los 'magentas' sería la de la ministra de Igualdad, Irene Montero, a la sazón pareja del cofundador y, para algunos, líder en la sobra de Podemos a día de hoy.

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