Policías y guardias civiles empiezan a ver la luz con la aproximación de las elecciones

Más de 80.000 policías y guardias civiles se manifestaron el pasado 6 de mayo en las calles de Madrid tras la convocatoria de Jusapol y cada semana la plataforma por la equiparación salarial y la jubilación digna, donde confluyen la mayoría de sindicatos y asociaciones policiales, se concentra frente a las administraciones públicas.

Son los síntomas del hartazgo por unas condiciones que llevan décadas en la lista de promesas electorales incumplidas. Pero, desde que el pasado 29 de mayo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el adelanto electoral, policías y guardias civiles comienzan a ver la luz al final del túnel. Queda por saber si será una luz electoral o una luz permanente.

Según explica el sindicato Justicia para la Policía, Jupol, El Defensor del Pueblo, ha indicado que el Ministerio del Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha iniciado, desde la Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social, que las modificaciones solicitadas por este sindicato en relación a la jubilación de los policías nacionales «está en fase de tramitación de conformidad con lo indicado en el Real Decreto 1698/2011, de 18 de noviembre, por el que se regula el régimen jurídico y el procedimiento general para establecer coeficientes reductores y anticipar la edad de jubilación en el sistema de la Seguridad Social».

De igual modo, con el acercamiento de la fecha electoral, los diferentes sindicatos y asociaciones policiales están siendo recibidos por los grupos parlamentarios. Al menos en los despachos, recibieron el compromiso de iniciar los trámites para conseguir la equiparación salarial con los cuerpos policiales autonómicos en caso de llegar al Gobierno después del 23J. Se trata, afirman los sindicatos, de cumplir lo firmado por el Ejecutivo de Rajoy en el año 2018.

Las reivindicaciones continúan

Pero no todo son luces. Este viernes, sin ir más lejos, decenas de agentes de policía y guardias civiles se concentraron frente a la comisaría de la Policía Nacional en la Vía Laietana de Barcelona para reclamar que se considere a Cataluña «Zona de Especial Singularidad por el acoso independentista que sufren», afirma el Sindicato Unificado de Policía.

Algo parecido sucede también en Andalucía, donde la lucha contra el narcotráfico se ha convertido en una actividad de riesgo. En este mismo sentido, las asociaciones policiales consideran que el número de agentes destinados en el Campo de Gibraltar es sensiblemente inferior a la necesaria.

Se trata en definitiva de pequeños gestos esperanzadores. «Ahora hace falta comprobar si esas luces son reales o son meras bombillas electorales», afirman los agentes. Queda mes y medio para descubrirlo.