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Meritxell Batet abandona la idea de presidir el Congreso entre voces que reclaman el puesto

Miembros de Izquierda Unida y Podemos habían reclamado que el cargo fuera para otro partido

En plena negociación sobre los cargos de la Mesa del Congreso, que se nombrará el próximo 17 de agosto, varios medios de comunicación, agarrándose a «fuentes socialistas», aseguran que la actual presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, ha decidido «por motivos personales» dar un paso a un lado y renunciar a repetir el cargo.

Según estas informaciones, la todavía presidenta del Congreso pidió hace ya tiempo al presidente del PSC que le buscara un sustituto, pero el adelanto electoral anunciado por Sánchez hizo que Salvador Illa le pidiese un último esfuerzo y encabezase la delegación socialista catalana para las elecciones del 23-J. Una vez cumplida la misión, y después del éxito cosechado por los socialistas en Cataluña, Batet ha vuelto a pedir quedarse a un lado.

Ante la incertidumbre que se vislumbra en la conformación de una mayoría que respaldo el futuro Gobierno de España, los socialistas se han apresurado a iniciar los contactos para obtener una mayoría en la Mesa del Congreso que se constituirá la semana que viene Pretenden que sea el primer paso para recabar apoyos de cara a una investidura de Pedro Sánchez.

La número dos de ERC al Congreso por Barcelona en las elecciones generales, Teresa Jordà, afirmó este lunes que ya hay contactos para la composición de la nueva Mesa del Congreso y que la apuesta es que alguien del PSOE revalide la Presidencia, además de que los independentistas o el PNV tengan un puesto en el órgano de gobierno de la Cámara.

No quieren socialistas

Sin embargo, los que Pedro Sánchez espera que sean sus socios, los de Podemos, no están demasiado de acuerdo con que Batet repita en el cargo. El que fuera portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, afirmó ayer que sería «una temeridad» que Batet repitiera en el cargo e hizo un llamamiento para que sea otro partido político quien aporte la figura de presidente del Congreso de los Diputados.

También el dirigente de Izquierda Unida, Enrique Santiago, apostó por que la presidencia del Congreso de los Diputados recaiga en otro partido que no sea el PSOE. No obstante, consideró que hay que acordarlo «colectivamente».