PSOE y PP buscan apoyo prometiendo puestos en la Mesa del Congreso a sus socios

La dificultad de los partidos mayoritarios para conformar Gobierno ha convertido los nueve asientos de la Mesa del Congreso de los Diputados en una baza de negociación de la que los partidos nacionalistas están dispuestos a sacar provecho.

Tanto PP como PSOE tienen asegurados cuatro miembros cada uno. Ambas formaciones están dispuestas a ofrecer uno de los asientos a los partidos que faciliten su investidura. Los potenciales socios de los socialistas lo tienen claro. Así lo ha declarado la número dos de ERC en el Congreso por Barcelona, Teresa Jordà, que ha asegurado que una de esas sillas podría «pertenecer al independentismo o al PNV». «Eso está abierto y forma parte de las negociaciones», ha añadido en una entrevista para El Periódico.

Será el próximo 17 de agosto cuando se constituyen las Cortes. Lo que ocurra en esta jornada, determinará en buena parte el resultado posterior. Los diputados votarán en urna y de manera secreta para elegir los miembros de la Mesa que tendrán un papel de gobierno de lo que ocurra bajo el techo de la Cámara Baja. Además, contarán con el control del gasto y la calificación de los escritos que permite admitir o no los mismos. Respecto a la elección del presidente del órgano del Congreso, el reglamento establece que «cada Diputado escribirá sólo un nombre en la papeleta. Resultará elegido el que obtenga el voto de la mayoría absoluta de los miembros de la Cámara. Si ninguno obtuviera en primera votación dicha mayoría, se repetirá la elección entre los que hayan alcanzado las dos mayores votaciones y resultará elegido el que obtenga más votos». Es decir, observando la elección de presidente se podrá deducir cuál de los dos candidatos tiene mayor apoyo y, por lo tanto, cuál será investido como líder del Ejecutivo.

Conseguir grupo propio

Otro de los puntos clave de las negociaciones es la obtención por parte de los nacionalistas de grupo propio dentro del Congreso de los Diputados. Sin embargo, el reglamento de la Cámara Baja se necesita para ello un mínimo de 15 diputados o 5 diputados siempre y cuando se tenga un 15 % de los votos en las circunscripciones en las que se haya presentado o un 5 % en todo el país. Ni Junts ni ERC cumplen con estos requisitos, pero existe la posibilidad de que los partidos interesados cedan diputados como se hizo en el 2004 cuando dos diputados socialistas fueron cedidos para que Coalición Canaria pudiese formar grupo propio.

Detrás de la formación de grupo propio existen las ventajas de ser beneficiario de subvenciones públicas y conseguir tiempo y espacio para intervenir durante los debates.